Salarios reales llevan 15 meses en retroceso y cerraron 2022 con una caída de 1,7%

La inflación parece no echar píe atrás y así lo reflejan los datos liberados este martes por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

El servicio informó que en diciembre de 2022 los Índices Nominales de Remuneraciones (IR) y del Costo de Mano de Obra (ICMO) registraron alzas en doce meses de 10,8% y 10,5%

Así, el Índice Real de Remuneraciones -que mide la evolución de las remuneraciones nominales pero ajustadas por la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC)- acumuló una variación interanual de -1,7% en diciembre, con lo que completó 15 meses de caídas seguidas, desde octubre de 2021. Esto, en un escenario en el que la inflación acumuló a diciembre un incremento de 12,8%.

La remuneración media por hora ordinaria se situó en $6.162. Para las mujeres, el valor alcanzó $5.847, mientras que para los hombres, $6.435

En cuanto a la variación de brecha de género de la remuneración media por hora ordinaria fue de -9,2% mientras que la del costo de la mano de obra por hora total fue -9,1%.

Juan Bravo, director del Observatorio del Contexto Económico (OCEC) de la Universidad Diego Portales, señaló a La Tercera que “los reajustes de remuneraciones no están logrando compensar totalmente el alza en el costo de la vida, esta situación implica que los salarios compran menos bienes y servicios en comparación al año pasado. Con todo, la caída anual de las remuneraciones reales de 1,7% en diciembre de 2022 es de menor magnitud en comparación a lo observado en meses anteriores y, en particular, a la disminución máxima de 2,8% de este indicador exhibida en julio de 2022. Esta moderación del retroceso de los salarios reales va en línea con la reducción paulatina de la inflación anual”.

En tanto, el académico de la Universidad Alberto Hurtado, Mauricio Tejada, dijo al mismo medio que “los salarios nominales están desde hace varios meses creciendo a tasas en dos meses menores a la inflación lo que se ha traducido en una pérdida del poder adquisitivo de esos salarios. Ahora como la inflación a tendido a ceder un poco hacia finales de año, la caída en los salarios reales se atenuó es incluso mostró un repunte en el margen (crecimiento mes a mes), el primero desde hace más de un año”.

Escenario por sector

De acuerdo con el informe, comercio nuevamente fue el sector que más incidió en la variación a doce meses del IR e ICMO. En este destacaron las empresas grandes, seguidas por las pequeñas y medianas. Según grupo ocupacional, los más relevantes fueron trabajadores de apoyo administrativo, vendedores, profesionales y trabajadores no especializados.

Industria manufacturera consignó la segunda mayor influencia positiva en la variación en doce meses. Esta dinámica, sostienen los realizadores del boletín, se explicó por el crecimiento de las empresas grandes, medianas y pequeñas. Aquí, los grupos ocupacionales de mayor influencia positiva en el sector fueron operarios manuales, operadores de maquinas y profesionales.

El tercer sector que más aportó fueron las actividades financieras y de seguros. Su dinamismo impulsado por las grandes empresas logró situarlos en esta posición. Los grupos ocupacionales más relevantes fueron profesionales, técnicos y directivos y gerentes.

Avisos laborales siguen cayendo

Por otro lado, un indicador adelantado que permite monitorear cómo estará el empleo son las ofertas laborales por Internet, que mes a mes publica el Banco Central. En enero, ese índice llegó a 58 puntos (con base 100 en enero 2015) y cayó 38,9% con respecto al mismo mes del año pasado, con lo que completó además ocho meses consecutivos de caídas interanuales.

Sin embargo, respecto al mes previo, anotó un incremento de 3,4%. Hay que considerar, eso sí, que en diciembre el índice realizado por el BC había anotado su menor desde septiembre de 2020, cuando recién el país estaba saliendo de la primera gran cuarentena, lo que sigue mostrando el deterioro del mercado laboral.

Este indicador, en general, muestra un comportamiento similar a lo que pasa con los datos de empleo asalariado de la Encuesta de Empleo del INE, aunque con un rezago debido al tiempo que demoran las plazas en ser llenadas.