A cinco días de su muerte, finalmente los restos de Pelé llegaron al cementerio Memorial Necrópole Ecuménica, donde descansará para toda la eternidad, tras una larga procesión por la ciudad brasileña de Santos. En la recorrida, el astro del fútbol mundial fue despedido por miles de personas.
El féretro negro fue bajado del camión de bomberos que viajó unos 7 kilómetros por la ciudad portuaria, luego de haberse retirado del estadio Vila Belmiro del Santos FC, donde O’Rei, que murió a los 82 años, fue velado durante 24 horas por más de 230.000 personas presentes.
El entierro, precedido de una ceremonia religiosa, se realizó a puertas cerradas con la presencia de familiares e íntimos en el cementerio vertical más alto del mundo con 14 pisos, según el Record Guinness.
Los restos mortales del tricampeón del mundo con la selección de Brasil fueron sepultados en un mausoleo que recuerda un estadio de fútbol, inclusive con césped sintético.
El presidente de Brasil, Lula da Silva, en compañía de la primera dama, Rosângela da Silva, asistieron a lo que fue el velatorio de Pelé. El mandatario llegó durante la mañana al estadio Vila Belmiro, estando al rededor de media hora, donde tuvo lugar una ceremonia religiosa para orar por ‘O Rei’. Cuando terminó este acto, Lula se retiró del recinto.
Durante su ingreso al lugar, Lula fue recibido con aplausos. Posterior a ello expreso, “la muerte llega para todo el mundo, para los reyes también”.