2021: Las licencias por salud mental se dispararon y aumentaron en un 44%
“Hoy está imposible encontrar horas con siquiatras o con psicólogos”, apuntan expertos.
La salud mental fue una de las grandes afectadas tras la pandemia en Chile, algo que se ha evidenciado en todos los rangos etarios, géneros y condiciones. Una de las evidencias es el significativo aumento de las licencias médicas en esta área.
Según datos de la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso), durante 2020 se otorgaron 1.730.263 permisos por alguna patología mental, número que llegó a 2.500.323 en 2021, es decir, un aumento del 44,5%.
“Hay un aumento sostenido de las patologías mentales en el contexto de la pandemia. Pero esto no solo se nota por los pacientes que necesitan licencia, sino que las consultas de salud mental han crecido mucho. Por eso hoy está imposible encontrar horas con siquiatras o con psicólogos”, explicó Francisca Decebal-Cuza, magíster en Educación en Ciencias de la Salud y psiquiatra de Clínica Universidad de los Andes, para La Tercera.
La experta también apunta que este fenómeno se va a prolongar por un tiempo, pues “hay otros factores que influyen en la salud mental, como los temas económicos. Hoy lo que está pasando con los empleos o la inflación también influye. Además, hay mayor incertidumbre por todo el contexto sociopolítico a nivel nacional”.
Licencias falsas
El aumento de este tipo de licencias médicas también genera alerta, ya que según los datos del Compin (Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez), durante este año se identificaron 603 profesionales considerados grandes emisores, algunos incluso que han dado 134 licencias por día, es decir, una cada cuatro minutos, durante nueve horas.
“Por distintas razones, incluso por aspectos vinculados a la seguridad social, han recurrido a licencias médicas excesivas o fraudulentas. Hay dos tipos de licencias médicas fraudulentas que son muy difíciles de probar: una, son las que tienen relación con la salud mental, y otras son las que tienen que ver con dolores de la columna o traumatológicos”, señaló Héctor Sánchez, director del Instituto de Salud Pública de la U. Andrés Bello.
Eso sí, Sánchez apunta a que no se debe perder de vista que, probablemente, la mayor parte de estos permisos corresponde a pacientes reales: “La pandemia ha sido una situación absolutamente extraordinaria. Uno de los efectos que ha tenido es que el encierro excesivo y estar permanentemente alejado de las actividades normales es el aumento de las enfermedades mentales, más de las que habíamos tenido históricamente. Y esa es una realidad”.