El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, visitó la ciudad de Jersón luego de la retirada de las tropas rusas de esa ciudad, pese a que esta fue “anexada” por Rusia.
“Es el comienzo del fin de la guerra”, dijo el mandatario, momento en el que reiteró la promesa de expulsar por completo a las tropas invasoras. “Es importante estar aquí (…) para que la gente pueda sentir que no son solo palabras y promesas, sino que realmente volvemos y hacemos ondear nuestra bandera”.
“Nuestros enemigos perecerán, como el rocío al sol, y nosotros también, hermanos, gobernaremos, en nuestro país. Por nuestra libertad, daremos nuestras almas y nuestros cuerpos”, fue parte de lo que cantaron.
En fotografías publicadas en Telegram, se vio al líder ucraniano caminando por las calles de la ciudad con ropa militar y rodeado de guardaespaldas armados, aunque él no llevaba casco ni chaleco antibalas.
“¡Gloria a Ucrania!”, gritaban algunos residentes desde el balcón de un edificio, “Gloria a los héroes”, respondió el mandatario los militares que lo acompañaban.
Tras la retirada rusa, las autoridades ucranianas dicen estar encontrando pruebas de tortura y otras atrocidades.
“Los investigadores ya han documentado más de 400 crímenes de guerra rusos, y se han encontrado cadáveres tanto de civiles como de militares (…) En la región de Jersón, el ejército ruso dejó atrás las mismas atrocidades que en otras regiones de nuestro país”, dijo el mandatario a través de un video, a lo que agregó “Encontraremos y llevaremos ante la justicia a todos los asesinos. Sin duda alguna”.
Zelensky también llamó a tener cuidado en la zona: “Por favor, no olviden que la situación en la región de Jersón sigue siendo muy peligrosa. En primer lugar, hay minas. Desgraciadamente, uno de nuestros zapadores murió y otros cuatro resultaron heridos mientras limpiaban minas”.
“Estamos haciendo todo lo posible para restablecer la capacidad técnica normal de suministro de electricidad y agua lo antes posible”, comentó. “Traeremos de vuelta el transporte y el correo. Vamos a traer de vuelta una ambulancia y la medicina normal. Por supuesto, el restablecimiento del trabajo de las autoridades, la policía y algunas empresas privadas ya están empezando”.
Los residentes dijeron que las tropas rusas que se marcharon saquearon la ciudad, llevándose el botín cuando se retiraron la semana pasada. También destrozaron infraestructuras clave antes de retirarse a través del ancho río Dniéper hacia su orilla oriental.