Bachelet dice que ha estado “bajo una tremenda presión” antes de entregar informe sobre DD.HH. en Xinjiang
La Alta Comisionada de la ONU para los DD.HH. informó que ha recibido una carta por parte de al menos 40 países -sin nombrarlos- que le han exigido no publicar un informe sobre las condiciones de la minoría uigur en esta región de China.
“He estado bajo una tremenda presión. Pero no retendré la publicación debido a ello”, explicó la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet la inminente publicación de un informe sobre la situación de los Derechos Humanos en la región china de Xinjiang.
Bachelet dijo que ha recibido una carta por parte de al menos 40 países -sin nombrarlos- que le han exigido no publicar un informe sobre las condiciones de la minoría uigur en esta región de China.
La ex presidenta de Chile visitó Xinjiang y otras regiones chinas el pasado mes de mayo. Durante la visita, se abstuvo de criticar las políticas de Pekín en la región, lo que generó críticas por parte muchos países por su ambigüedad frente a las violaciones de Derechos Humanos en la región.
Por su parte, el portavoz de Human Rights Watch, John Fisher (HRW), ya explicó que sería una “negligencia en el cumplimiento del deber” que Bachelet le fallara a los uigures y otras víctimas. “Está en juego su propia reputación y legado, la credibilidad de su oficina y la confianza de las víctimas y sus familias”, dijo en Ginebra.
El relator de Naciones Unidas Tomoya Obokata consideró en agosto “razonables” las denuncias de las organizaciones internacionales sobre el trabajo forzado y la represión contra las minorías étnicas en el gigante asiático.
Obokata explicó que era “razonable” concluir que entre los uigures, los kazajos y otras minorías étnicas se han registrado repetidamente episodios de trabajo forzoso en sectores como la agricultura y la industria manufacturera.
Las autoridades chinas han puesto en marcha una serie de medidas en la región de Xinjiang que han provocado fricción entre el gigante asiático y la comunidad internacional, especialmente Estados Unidos, que ha llegado a acusar a Pekín de cometer violaciones contra los Derechos Humanos e incluso genocidio contra la población uigur.