“Este aumento sostenido de casos, es parte de lo que hemos hablado de los cambios epidemiológicos de la pandemia. Estamos en una etapa que se caracteriza por que tenemos otras variantes y linajes”, aseguró en el Punto Covid-19 la ministra de Salud, Begoña Yarza.
Respecto del plan de inoculación, la titular del Minsal aseveró que “las campañas de vacunación no han parado, hemos desplegado estrategias para también estar fuera de los centros de salud, en lugares de trabajo, universidades e institutos, y estrategias focalizadas para la educación escolar”.
En la actualidad, apenas el 57% de la población objetivo se ha vacunado con el segundo refuerzo (cuarta dosis). Según los datos del Ministerio de Salud, actualmente hay 1.599.456 personas que están atrasadas con su tercera dosis, y 1.899.595 con la cuarta. Es decir, hay casi 3,5 millones de dosis rezagadas y, por consiguiente, más de un millón y medio de personas con el Pase de Movilidad bloqueado.
“Estamos débiles con la vacunación. Un 56% de la población tiene la cuarta dosis, es decir, hay un 44% sin el refuerzo, eso es mucho. Ya llevamos seis meses administrando cuarta dosis, no podemos estar así. Además, la tercera dosis en la población infantil también está baja, por eso estamos viendo más brotes en la población escolar”, afirmó María Luz Endeiza, infectóloga pediátrica y jefa del vacunatorio de Clínica Universidad de los Andes, a La Tercera.
Por su parte, Luis Castillo, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la U. Autónoma y exsubsecretario de Redes Asistenciales, afirmó que medidas como las mascarillas o el aforo son fundamentales, pero mejorar la tasa de vacunación permitiría ser menos restrictivos. Eso sí, sin llegar todavía a “gripalizar” el Covid-19.
“Si estuviese la cuarta dosis funcionando bien, ya estaríamos pensando en vacunar a las personas de riesgo con una quinta dosis. Eso ayudaría a dejar mascarillas u otras restricciones, pero no es el caso. Hay una disminución de la tasa de vacunación, con un número no menor de personas que no se han vacunado con la cuarta dosis. También hay fatiga pandémica: la gente está cansada de las medidas restrictivas”, señaló.
Frente a este escenario, el director del Instituto de Salud Pública de la U. Andrés Bello, Héctor Sánchez, sostuvo que es necesario mantener las estrategias actuales, pues frente a un alza fuerte, las redes asistenciales tendrían poca capacidad de respuesta: ”No estamos preparados para eliminar las medidas de restricción, porque, si no, los contagios serían mucho más altos. También hay que tener presente que la capacidad de atención no es mucha, porque estamos copados con las patologías no Ges (garantías explícitas en salud)”.