“Nuestros contratos de trabajo en ninguna parte dicen que los docentes estemos contratados para cuidar niños. No somos guardería y reiteramos e insistimos en ello. Por tanto, esto de que hay que venir porque hay que cuidar probablemente a algunos niños, no está en nuestro contrato de trabajo. Y tampoco está en nuestro contrato de trabajo dar almuerzo a los estudiantes”.
Con estas palabras, el presidente del Colegio de Profesores, Carlos Díaz, se mostró en contra de la idea de mantener abiertos los establecimientos educacionales durante la semana de vacaciones que agregó el Ministerio de Salud.
El Gobierno dispuso que los colegios estén abiertos entre el 30 de junio y el 6 de julio, pese a que las vacaciones de invierno de los estudiantes en la mayor parte del país empiezan el mismo 30 de junio.
La decisión estaría enfocada en darle continuidad a la alimentación que reciben muchos niños por parte de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb).
“El documento oficial que emana del Ministerio de Educación señala con mucha claridad que quien va a asumir esta responsabilidad serán los docentes directivos”, agregó Díaz.
El propio Presidente Boric manifestó -tras la decisión de extender las vacaciones para evitar una mayor circulación viral- “que se mantuvieran los colegios abiertos justamente para que se pudieran realizar actividades extraprogramáticas para que no incidiera, también, en el trabajo de las mujeres. Y, por cierto, para la alimentación”.