Cinco años más de pandemia: El lapidario informe que dice que el Covid-19 durará hasta el 2027
“No debemos tener una visión estrecha de la pandemia o minimizar sus impactos más allá de la salud pública, de lo contrario, las desigualdades crecerán y las consecuencias más amplias se sentirán en todas las sociedades de todos los países”, advirtió el presidente del consejo, Peter Gluckman, durante la presentación del informe.
El Consejo Internacional para la Ciencia (ISC, su sigla en inglés), publicó un desalentador informe en el que proyecta que la pandemia continuará al menos por otros cinco años, aunque con tres escenarios diferentes.
“Sin precedentes e inacabado: Covid-19 e implicaciones para la política nacional y mundial”, el documento detalla cuáles serían estos tres posibles escenarios de la pandemia que podría prolongarse hasta 2027.
Los autores del documento sostienen que “no pretende predecir el futuro”, ya que “hay demasiadas incertidumbres para hacer eso” respecto al coronavirus, pero que a pesar de ello, con la actual evidencia científica disponible, pueden teorizar cuáles son esos futuros escenarios.
“A pesar del rápido desarrollo de las vacunas, el cual ha sido un gran éxito científico posible gracias a una colaboración sin precedentes entre los sectores público y privado, ni el despliegue de vacunas ni la aplicación inminente de terapias antivirales serán suficientes para abordar las múltiples consecuencias de la pandemia”, señala el informe.
Los tres escenarios de la pandemia
Escenario de la continuidad
“El Covid-19 se ha convertido en una enfermedad endémica en todo el mundo, con oleadas de temporada que requieren vacunas actualizadas y el uso de productos farmacéuticos antivirales”, dice el documento en torno a este primer escenario.
En esta etapa, la colaboración mundial y regional durante los próximos cinco años dará lugar a vacunas eficaces que se van actualizando en función de cómo evoluciona el coronavirus, y la mayoría de los países cuentan tanto con estas como con dosis de refuerzo. Además, hay acciones esporádicas de recuperación social e inversión para reforzar los sistemas de salud.
Este es el más probable de los escenarios y en 2027 el Covid-19 se habrá convertido en una enfermedad endémica en todo el mundo, en gran medida debido a la mejora del desarrollo y la distribución de vacunas. Sin embargo, seguirá provocando oleadas estacionales que requerirán vacunas y refuerzos actualizados.
No obstante, la mayor parte de la población no vacunada del planeta seguiría concentrada en los países de bajos ingresos, sostiene el informe.
Recuperación fallida
Según lo redactores del informe, este escenario es absolutamente posible, en el que se presentan “condiciones sociales en declive y desigualdades en incremento, derivadas de las crecientes tensiones geopolíticas, como ya se pone de manifiesto con el conflicto de Ucrania, las políticas proteccionistas y la escasa colaboración mundial y regional en respuesta a la pandemia”.
Si bien, la mayoría de los países ha autorizado la administración de vacunas de refuerzo (incluso actualizadas), ante la disminución de la inmunidad, la mala respuesta en grupos vulnerables y las variantes más patogénicas o transmisibles.
Cooperación plus
Según este escenario, la colaboración mundial habrá convertido al Covid-19 en una enfermedad más manejable, y ya no sería una “prioridad aguda”.
Las vacunas se distribuirían de forma más equitativa por todo el mundo, cubriendo a más del 80 % de la población, mientras que las clases en los colegios ya no se verían interrumpidas y no se necesitarían medidas sanitarias restrictivas.
Además, los remedios antivirales estaría más baratos, y los países ricos habrían invertido en la digitalización, los sistemas sanitarios y la asistencia social. Por lo tanto, al colaborar más estrechamente los países, un sistema unilateral más fuerte habría puesto al mundo en mejores condiciones para hacer frente a otras crisis.
“No debemos tener una visión estrecha de la pandemia o minimizar sus impactos más allá de la salud pública, de lo contrario, las desigualdades crecerán y las consecuencias más amplias se sentirán en todas las sociedades de todos los países”, advirtió el presidente del consejo, Peter Gluckman, durante la presentación del informe.