Uno de cada 5.000 a 10.000 niños y niñas son afectados por la pubertad precoz especialmente para el género femenino con casos 10 veces más altos.
Según estudios en Chile y el mundo las niñas han empezado un desarrollo mamario antes de los 8 o 7 años, algo que debería ocurrir después de los 9 años.
Una investigación en Italia realizada durante 2020 reveló que 328 niñas mostraron signos de pubertad precoz comparada con las 140 durante el mismo período en 2019, lo cual también podría estar relacionado al uso productos químicos y farmacéuticos ambientales.
¿Qué tiene que ver?
Se trata de sustancias químicas que pueden interferir con el sistema endocrino, las glándulas que producen las hormonas. Diversos estudios indican que pueden acelerar y anticipar el proceso de maduración de las características sexuales secundarias.
Estas sustancias están en diversos productos: botellas, envases, mamaderas, productos de limpieza e higiene como jabones, shampoos y cremas. Las sustancias químicas como el Bisfenol-A y los ftalatos, también puedenafectar el la fertilidad, provocar daños neurológicos, inmunológicos, e incluso hasta cáncer.
Los productos cosméticos, al estar envasados de policarbonato, tienen sustancias que pueden migrar hacia el producto.
Por ejemplo el formaldehído está prohibido en esa industria cosmética, pero hay varios ingredientes conservantes o quelantes, que liberan esta sustancia.
