Más de un año lleva el proceso de vacunación contra el SARS-COV2 en nuestro país, luego de que el 24 de diciembre de 2020 llegara el primer cargamento de dosis Pfizer-Biontech. Desde entonces, se inició una campaña que ha reconocido a Chile a nivel mundial por su rapidez. Al 7 de marzo del 2022, más de 49,060 millones de dosis han sido aplicadas y un 93,26% de la población mayor de 18 años ya recibió ambas dosis.
Además, nuestro país fue el segundo en el mundo después de Israel en iniciar la vacunación con la cuarta dosis, el pasado 10 de enero. A esto se suma la instalación en Chile de una planta de la farmacéutica china Sinovac, una de las mayores productoras de vacunas contra el Covid-19.
Desde que inició esta campaña, el ISP se ha encargado de monitorear e investigar los efectos de las vacunas en la población, a través de la emisión de Eventos Supuestamente Atribuibles a la Vacunación e Inmunización (Esavi).
Cifras de Esavi y hospitalización
Desde el 24 de diciembre de 2020 a noviembre de 2021, se recibieron 14.014 notificaciones Esavi. Esto equivale a que el 0,04% de las dosis administradas en el período —que corresponde a 34.441.228 vacunas—,cada 100 mil dosis, se registraron 39,7 Esavi.
Del total de alertas, 34 han sido graves, pues se asocia presuntamente al fallecimiento de una persona.
14 de estas corresponde a vacunación con Sinovac, 14 a AstraZeneca y 6 a Pfizer. Al día de hoy, el 85% de los casos fue descartado por el ISP.
De los 29 fallecimientos notificados como Esavi, no hubo vínculo con las vacunas. Otros cinco, aún se investigan.
Pese a estos casos aislados, los expertos son enfáticos en mantener la confianza en el proceso de inoculación. Esto, debido a que las probabilidades de sufrir cuadros atribuibles a la vacunación son mínimas.
Así lo confirma Miguel O’Ryan, infectólogo de la Universidad de Chile, quien aseguró a La Tercera que “las vacunas contra el Covid-19 tienen diferentes tipos de efectos adversos, pero ninguna se ha asociado al riesgo de muerte. Todo lo contrario, la vacuna está protegiendo contra el virus y lleva a reducir la muerte en las personas inmunizadas y hace una diferencia con aquellos que no están vacunados”.
“Gracias a la vacuna hemos podido vivir un brote de gran magnitud como ha sido esta ola generada por la variante Ómicron, con una proporción de casos graves mucho menor. Por lo tanto, con menos estrés para el sistema de salud. Si bien las vacunas no reducen totalmente el riesgo de infección, sí reducen la probabilidad de tener casos graves y de fallecer”, dijo al citado medio la integrante del Consejo Asesor Covid-19, Ximena Aguilera.
Los datos que entrega el Minsal, respaldan el proceso de vacunación. El resultado es que la tasa de ingreso a UCI es de 6,5 cada 100 mil habitantes sin protección contra el virus. Esto disminuye en quienes tienen su esquema completo a 2,3, y en la población con el refuerzo (tercera dosis) es aún menor con 0,8 por cada 100 mil habitantes.
Efectos adversos y síntomas de Esavi
5,1% del total de eventos adversos reportados son graves, lo que equivale a una tasa de notificación de 2,02 reportes por cada 100.000 dosis administradas.
La inoculación con AstaZeneca tuvo como efecto adverso más común el tromboembolismo, con 2,39 denuncias cada 100.000 dosis administradas. Incluso, el Minsal suspendió la inoculación con esta vacuna en Chile en menores de 35 años, luego de un reporte de trombosis.
Con Sinovac y Pfizer el síntoma más frecuente fue la anafilaxia -que corresponde a una reacción alérgica grave- con una tasa de incidencia de 0,85 y 0,75, respectivamente, cada 100 mil dosis administradas.