Una conciliación se llevó a cabo en la Tercera Sala de la Corte Suprema por el caso de Minera Dominga, de Andes Iron, quienes estaban dispuestos a llegar a un acuerdo que le de viabilidad al proyecto.
Entre las propuestas se encontraba el ofrecimiento de agua desalinizada -apta para consumo humano- para toda la comuna de La Higuera (Coquimbo), es decir, para un total de 4.271 habitantes. Una acción que se prolongaría durante los 25 años que funcione el proyecto.
“El proyecto ha asumido la preocupación de las personas que se dedican al campo, de manera que Dominga ha considerado la dotación de agua a los sistemas de Agua Potable Rural (APR) de la comuna, con el propósito de disminuir la presión de bombeo sobre el acuífero de Los Choros, permitiendo el restablecimiento de sus niveles, promoviendo un uso racional de parte de los agricultores”, sostiene el documento, según informó La Tercera.
También propuso “apoyar la creación de una Comunidad de Aguas Subterráneas en la Cuenca de Los Choros, con el objetivo de contar con una mejor gestión del recurso hídrico en esta cuenca, racionalizando el uso del recurso hídrico, el seguimiento de la calidad del agua subterránea y empujando en la generación de iniciativas de reutilización de aguas grises, entre otras”.
Por otro lado también se contempló una disminución de trayecto marítimo por el área marítima sensible: “Se propone que el ingreso y salida de los buques sea desde alta mar directamente a Totoralillo Norte y viceversa, de manera que la misma ruta que actualmente está contemplada -y por tanto evaluada- para la salida de los buques sea utilizada para su llegada”, decía el documento, pasando además de los 4 a 6 barcos mensuales contemplados en un principio, a uno a la semana.
“Nos obligamos a disminuir las áreas de tráfico naviero a solo un 15% de las contempladas inicialmente. Así se eliminarían 55 kilómetros de trayecto actualmente contemplado por el Proyecto desde el puerto de Coquimbo a Totoralillo Norte”, agregaba el texto.
No hubo acuerdo
La audiencia no rindió frutos y se espera que las partes se reúnan en un nuevo encuentro durante los próximos días.
“La audiencia de conciliación se llevó a cabo mediante una conversación que tuvo uno de los ministros de la Corte Suprema con cada una de las partes. Terminada la audiencia, todas las partes recurrentes, es decir, comunidades y organizaciones que estamos en contra del proyecto Dominga, manifestaron que no existían posibilidades de llegar a ningún tipo de acuerdo, puesto que lo que se está discutiendo son las posibilidades de desarrollo de esas zonas a través de las actividades que se llevan a cabo y también de la protección del medio ambiente”, manifestó Ezio Costa, director ejecutivo de ONG FIMA y representante de Oceana (una de las partes del juicio y opositor al proyecto).