Desde fines de 2020 que la autoridad sanitaria española trabaja en esta transición. El cambio será paulatino e implica la colaboración entre especialistas y hospitales, que actuarán como testigos. El objetivo es cambiar de conteo exhaustivo a una extrapolación estadística y representativa de datos. Esto será repartido en puntos clave para conocer cómo se expande la enfermedad.
Los encargados del cambio son el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) y el Centro Nacional de Epidemiología (CNE).
La transición aún no tiene fecha exacta, pero se estima que llegue tras acabar la sexta ola que está atravesando actualmente Europa por la variante Ómicron.
“Ahora, dada la enorme transmisibilidad del Covid, resulta un desafío muy grande cumplir estrictamente con los protocolos de vigilancia universal, se está haciendo imposible” dijo a El País Amparo Larrauri, del grupo de vigilancia de gripe y otros virus respiratorios del CNE.
Esto ocurre luego de que se notificaran 292.394 nuevos contagios y 202 muertes desde el viernes en el país ibérico.