Cada 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, evento que busca llamar la atención sobre la importancia del agua dulce y la defensa en la gestión sostenible de este recurso.
Durante los últimos años el agua se ha vuelto uno de los factores más importantes a nivel mundial, ya que por los efectos del cambio climático han disminuido las reservas, como el deshielo de glaciares y la falta de lluvias.
Este tema también se ha vuelto trascendental en Chile, ya que el país enfrenta una sequía de más de una década y donde el uso y los derechos del agua han estado en controversia y discusión debido al proceso constitucional.
¿Qué se puede hacer para cuidar el agua?
Expertos buscan hacer conciencia sobre la crisis hídrica que afecta al país, intentando derribar el mito de que las personas consumen una mínima parte de la producción de agua, como en el caso de Santiago, donde la población hace uso del 80% de las aguas del río Maipo.
En Chile, el consumo promedio diario es de 172 litros por habitante cada día, donde se incluye le aseo diario, agua para tomar, aseo del hogar y regado de plantas. “Una cifra superior a la media en Europa, que es de 128 litros por persona”, ejemplificó Melissa Vargas, experta en recursos hídricos de Fundación Somos Agua en La Tercera.
La experta agregó que en la capital, zonas como Puente Alto, Pudahuel, La Granja y Lo Prado consumen menos de 100 litros por persona al día, pero en lugares como Lo Barnechea, Vitacura, La Reina y Huechuraba, puede llegar a más de 600 litros por persona de forma diaria.
“La eficiencia hídrica es fundamental y viene de la mano con la educación ambiental y concientización, para generar así un cambio de mentalidad en la población en pos del ahorro y cuidado del agua”, agregó Vargas.
Aún así, la responsabilidad no es solamente de la población, sino también de empresas y de las políticas públicas que se implementen para un manejo sustentable de este recurso, como explica Natalia Dasencich, abogada y encargada de asuntos legales de la Junta de Vigilancia del Río Maipo, quien defiende la idea de avanzar hacia un modelo de cobranza de bloques volumétricos progresivos, “donde los primeros son baratos y cubren el consumo humano, pero en los siguientes -que dejan de ser sustentables- se empieza a pagar más”.
Tips para ahorrar
En la cocina o logia
- Lavar frutas o verdura en una fuente y, si se puede, reutilizar el agua para riego, trapear el piso, lavadora o para llenar el estanque del inodoro.
- Ocupar detergente biodegradable para reutilizar el agua del lavado.
- Utilizar la lavadora con carga completa.
- Utilizar una lavaza, para lavar primero la loza y luego enjuagarla, en vez de lavar y enjuagar de manera seguida cada uno.
En el baño
- Utilizar duchas con ahorro de agua.
- Cepillarse los dientes con la llave cerrada.
- No utilizar el inodoro para tirar el papel higiénico.
- Cerrar la ducha para aplicar jabón, champú y bálsamo.
- No lavarse los dientes en la ducha o cerrar la llave antes si lo haces.
En el jardín
- Regar las plantas de noche.
- No cortar el pasto muy corto. Las raíces del pasto más largo aprovechan mejor el agua y disminuye la evaporación desde el suelo.
- Reutilizar agua de la vivienda para riego.
- Si es posible, reducir la cantidad de pasto en tu vivienda plantando árboles nativos, ya que están más adecuados a la escasez hídrica.
- Agrega una cobertura de hojas secas, ramas, paja o piedras (mulch) en el perímetro alrededor de la base de árboles, arbustos o herbáceas.
- No utilizar la manguera para barrer.
En casa
- Arreglar las fugas de agua.
- Incorpora al menos una ecotecnia en tu hogar (compostera, captación de agua lluvia, etc.) que te ayude a adquirir el hábito del ahorro.
- Revisar el consumo de agua y comparar gastos mes a mes.
- Implementar tecnologías como semáforos de duchas, biofiltros o herramientas que ayuden a controlar y/o recolectar el agua para darle otro uso.