Las mujeres consumen más alcohol y drogas que los hombres de acuerdo a estudio de Senda
A través del Senda se logró crear programas específicos para mujeres en todas las regiones del país.
El Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), dio a conocer la última encuesta nacional que realizó sobre adicciones, la cual reveló que los estudiantes secundarios chilenos lideran el consumo de alcohol, marihuana y tranquilizantes sin receta médica y en donde las mujeres superaron a los hombres por más de tres puntos.
Cerca de 800 mil estudiantes de 8° básico a 4° medio participaron del estudio, que comprueba que el consumo de estas sustancias sigue al alza.
Porcentajes de consumo entre ambos géneros durante el último mes:
- Alcohol: Mujeres: 32,5% | Hombres: 27,2%
- Marihuana: Mujeres: 27,7% | Hombres: 25,9%
- Tranquilizantes sin receta médica: Mujeres: 9,9% | Hombres: 8,5%
- Cocaína: Igual cantidad, con una mínima brecha que se ha ido acortando desde 2017.
Además, a nivel latinoamericano, Chile ocupa el primer lugar entre los países con consumo de tabaco, marihuana, cocaína, pasta base y tranquilizantes entre personas que inician su consumo entre los 13 y 14 años, según información de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas de 2019.
Cambios en los últimos años
El psicólogo Rodrigo Venegas, docente de la Universidad San Sebastián y especialista en temáticas infanto-juvenil, sostiene que uno es una sorpresa que esto esté sucediendo.
“Lo primero es que hay poca focalización para disminuir el fenómeno. Senda hace el esfuerzo, pero claramente falta un modelo de prevención. Otro aspecto es que hay un cambio cultural en la adolescencia. Las mujeres, hasta 2010, consumían menos. Hoy, bajo el relato de igualdad, también se afectó estos componentes y, por último, el mercado, porque el acceso ahora es muy amplio. La tecnología también ha influido mucho, porque hoy en día, quien quiera consumir algo lo recibe en su casa a través de un delivery”, destacó en La Tercera.
En el mismo medio, el gerente general de la Fundación San Carlos de Maipo, Marcelo Sánchez (quienes también trabajan en rehabilitación de mujeres del consumo dependiente de estupefacientes), explica que la dependencia en mujeres es más problemático.
“Ellas cargan con todo el peso de la familia, muchas veces deben hacerse cargo desde muy chicas y se ven enfrentadas a situaciones anormales para los niños. Eso las lleva a buscar no sentir, a querer olvidar o experimentar otras sensaciones, por lo que sus consumos, además, son más complejos, porque son menos sociales, pues cargan con otro tipo de problemas que no tienen los varones”.
Por otro lado, la directora del programa para mujeres de Quilicura, Sucy Muñoz, también hace observaciones hacia familia: “Hay un abandono de los padres a los hijos, pues en muchos hogares los padres se enfocan demasiado en el trabajo, pero no se preocupan de entregar los valores de prevención a sus hijos. Eso, sin mencionar a los niños que sufren abusos de todos los tipos en sus hogares, lo que claramente influye en los patrones de consumo”.
Carlos Charme Fuentes, director de Senda, explica que “los adolescentes tienen menor consciencia de daño. Por ejemplo, la marihuana genera daños sicológicos y físicos en los jóvenes, pero ellos creen que no hace mal, o que les hará daño más adelante. Perdieron el miedo a engancharse a eso”.
A través del Senda se logró realizar un enfoque femenino, estableciendo centros de tratamiento y rehabilitación en todas las regiones del país.