La ola de frío polar que golpea gran parte de Estados Unidos ha dejado al menos 29 fallecidos y más de cuatro millones de hogares sin suministro eléctrico, mientras también ha comenzado a obstaculizar la vacunación contra la Covid-19.
El temporal ‘Uri’, que tiene a más de 150 millones de personas en alerta en distintos puntos del centro, sur y este del país. Las personas que han muerto en esta tormenta han sido por caídas, incendios en viviendas sin electricidad, intoxicaciones con monóxido de carbono en intentos de generar calor, atropellos o accidentes de coche, informa The New York Times.
Las bajas temperaturas han congelado también las fuentes de energía y han dejado sin electricidad a más de 3,7 millones de residentes y comercios en todo Estados Unidos, de los cuales 3,2 millones de ellos son de Texas, según el sitio Poweroutage.us.
A much different, darker looking Houston tonight. pic.twitter.com/bC3J4UF0bM
— Mycah Hatfield (@MycahABC13) February 17, 2021
Debido a esto, el gobernador de Texas, Greg Abbott, a solicitado investigaciones y reformas en el Consejo de Confiabilidad Eléctrica de ese estado, ya que, “la red ha sido todo menos confiable en las últimas 48 horas”.
En San Antonio, donde como en el resto del estado de Texas las temperaturas promedio en febrero rondan los 20°C, el martes se registraron -8°C, por debajo de los -7°C que marcó el termómetro en Anchorage, Alaska. En Austin, la capital estatal, llegó a haber -12°C.
La cadena NBC informó que una mujer y una niña fueron halladas sin vida el martes por intoxicación por monóxido de carbono tras usar un vehículo para generar calor en una casa de Houston afectada por los cortes de energía.
Batalla contra la pandemia
Las condiciones peligrosas por la tormenta también afectaron los envíos de vacunas contra el Covid-19, interrumpiendo las inyecciones previstas, señalaron las autoridades sanitarias.
Por ejemplo en Colorado, se verá afectada la llegada de 133.000 vacunas en los próximos días, mientras en Ohio se podría sufrir un retraso de dos días en la entrega del inmunizador, según su gobernador, Mike DeWine.
El presidente Joe Biden, que ya activó el domingo asistencia federal para Texas, conversó con el gobernador de ese estado el 16 de febrero y con los de otros estados afectados: Luisiana, Kentucky, Kansas, Tennessee, Misisipí y Oklahoma.
Por su parte, el gobernante dijo que “desplegará cualquier recurso federal de emergencia adicional disponible para ayudar a los residentes de sus estados a superar esta tormenta histórica”, informó la Casa Blanca.
Más hacia el norte, Chicago espera hasta 35 cm de nieve antes del final de la ola de frío. Las condiciones climáticas provocaron casi 60 cancelaciones de vuelos en los aeropuertos locales el martes, consignó una afiliada a la cadena ABC.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) anunció que el martes por la noche se desarrolló un área de baja presión sobre el sur de Texas que produjo “nieve y hielo intensos” desde las Grandes Llanuras del sur, que seguirá a través del valle de Misisipí el miércoles y hasta el noreste del país el jueves.
El aire gélido del Ártico persistirá sobre la zona central del país en los próximos días, señaló el NWS, tras advertir que la sensación térmica polar se extenderá hasta México.
Más del 73% del territorio continental del país ha estado cubierto de nieve el 16 de febrero, según la Oficina de Predicción del Agua de la Administración Oceánica y Atmosférica, con capas en 45 de los 48 estados de la zona.
Récords históricos
Al menos 20 ciudades han sufrido también el clima más frío de su historia. En el centro del país las temperaturas se han desplomado a mínimos que no se habían visto desde hace un siglo, con menos 45 grados centígrados en partes de Minnesota, por ejemplo.
Ciudades como Dallas, Houston y Oklahoma han registrado este martes por la mañana sus temperaturas más bajas desde 1989.
“Más de 150 millones de estadounidenses viven en un lugar donde se han implementado advertencias de frío extremo, lluvia helada o alertas de vigilancia por tormentas de nieve”, dijo el lunes el NWS.
“Cientos de récords de frío ya se han registrado y seguirán registrándose durante esta ola de frío polar”, agregó el NWS.