De miembro de Al Qaeda a líder del Estado Islámico: La vida de Abdullah Qurdash
Foto: BBC Tras la muerte de Abu Bakr al Baghdad en 2019, por un ataque estadounidense, el extremista de 45 años, asumió como jefe del grupo yihadista, antes se desempeñaba como ministro de Justicia.
El líder del Estado Islámico, Abu Bakr al Baghdadi, falleció en marzo del 2019 tras un ataque militar. Y fue Abdullah Qurdash, quien ocupó su cargo. Él nació en 1976 en Al Mehalabiya, a 35 kilómetros de Mosul, la segunda ciudad más importante de Irak.
El comandante Ahmed está a cargo de buscar a Abdullah y contó detalles del nuevo líder a la BBC Mundo. El militar afirmó que la familia de la que provenía Qurdash era muy respetada en su zona, su padre tenía dos mujeres y 17 hijos.
¿Cómo fue la vida de Abdullah?
Abdullah llevaba una vida tranquila, pero se comentaba que estaba siendo radicalizado por grupos locales. “Esta es una región remota, espaciosa… aquí se desarrolló Al Qaeda en Irak en 2003. Tenían una buena base de seguidores”, explica Abdel Rahman al Dawla, alcalde de Al Mehalabiya a la BBC.
“De hecho, la mayoría de los dirigentes militares y de seguridad de Estado Islámico proceden de estas zonas, especialmente de la cercana Tala’far”, contó el alcalde.
En 2003, cuando las fuerzas lideradas por Estados Unidos invadieron Irak, Abdullah ya participaba en grupos yihadistas más pequeños. Pero los abandonó para unirse a Al Qaeda, un grupo mucho más grande.
En 2008, los estadounidenses lo recluyeron en la prisión de Bucca, ahí lo interrogaron y estuvo dos años preso. En 2010, sin razón alguna, Abdullah fue liberado.
¿Cómo se unió al Estado Islámico?
Luego de salir de prisión Abdullah se unió al líder de ese momento. Ahí “se convirtió en un alto cargo de la organización en la provincia de Nínive”, explicó el coronel Ahmed. “Uno de los líderes más prominentes, muy cercano a Al Baghdadi” agregó.
En mayo de 2012, Abdullah recibió una nueva identificación y su aspecto cambió un poco. Un valioso informante de Estados Unidos aseguró a la BBC que “es muy extremista en algunas cuestiones; en general no confía en nadie, excepto en sus allegados”, aseveró.
“Lo que note es que no es un intelectual, por lo general, no tiene la capacidad de dar discursos como Al Baghhdadi. Este pronunció una vez un discurso público sin papeles en las manos, no creo que Abdullah sea capaz de hacer lo mismo” agregó.
A medida que las ambiciones de Al Baghdadi se expandieron, Abdullah asumió ser el ministro de Justicia, supervisando las ejecuciones y los castigos.
Abdullah camino al poder
En 2014 en la ciudad de Sinjar, se vio la crueldad y la creciente influencia de Abdullah. Mataron a miles de miembros de la minoría yazidí y querían esclavizar a las mujeres yazidíes.
Varios grupos de derechos humanos sostienen que 7.000 mujeres y niñas fueron capturadas y esclavizadas por el Estado Islámico. La ONU cataloga sus crímenes como el equivalente a un genocidio. Luego empezó a extender su brutalidad a ciudades importantes como Erbil y Bagdad.
Luego la comunidad internacional empezó a actuar y varios países los comenzaron a bombardear. Murieron muchos de los principales líderes del Estado Islámico, lo que hizo que Abdullah ascendiera en la cadena de mando.
Abdullah y su ascenso
En octubre de 2017, Al Baghdadi y Abdullah cruzaron a la ciudad siria de Al Bukamal, quienes casi mueren por un ataque aéreo. “Los aviones llegaron y bombardearon Al Bukamal. El jeque Abdullah sufrió heridas leves, pero su escolta murió. Sólo algo de metralla alcanzó a Abdullah. Fue trasladado al hospital”, recordó Salem.
En 2019 Abu Bakr al Baghdadi fue asesinado en un ataque estadounidense, dándole a Abdullah la oportunidad de convertirse en jefe. Los servicios de inteligencia iraquíes aseguraron que el jefe del grupo terrorista se esconde en el norte de Siria, posiblemente en las zonas controladas por las fuerzas kurdas.
