Las últimas decisiones de Trump que podrían complicar a Biden
A pesar de que tuvo una pérdida de poder político a fines de su mandato, eso no lo detuvo de implementar medidas que afectan la relación de EE.UU. con otros países.
Este 20 de enero se llevó a a cabo el “cambio de mando” estadounidense, donde Joe Biden y Kamala Harris asumieron como los nuevos representantes del país, aún así, las cosas no serían tan fáciles para ambos debido a algunos “legados” que la administración Trump dejó de último minuto.
1.- Cuba
A menos de dos semanas de dejar el cargo, Donald Trump anunció que devolvió a Cuba a la lista de países patrocinadores del terrorismo, justificándose en que ese país se negó a extraditar a miembros del Ejercito de Liberación Nacional (ELN) de Colombia, tras el atentado en una academia policial de Bogotá en enero de 2019, donde fallecieron 22 personas.
“Con esta medida de nuevo hacemos responsable al gobierno de Cuba y mandamos un claro mensaje: el régimen castrista debe acabar con su apoyo al terrorismo internacional y con la subversión de la justicia estadounidense”, manifestó en un comunicado el secretario de estado, Mike Pompeo.
Cuba estuvo en esta lista desde 1982 hasta 2015 cuando Barack Obama lo sacó, lo que marcó el inicio del “deshielo” y que continuó con la reanudación de las relaciones diplomáticas.
Biden ha mostrado su voluntad de mejorar las relaciones con la isla y continuar con el legado Obama, el que incluye que los cubano-estadounidenses puedan visitar a sus familiares y enviarles dinero, pero esto puede verse afectado debido a la decisión de Trump.
Para revertir la inclusión de ese país en esta lista el Departamento de Estado debe llevar a cabo una revisión formal, la que puede durar meses, además de que los congresistas pueden generar presión para incluir a Venezuela (donde Estados Unidos busca un cambio de gobierno) en vez de Cuba.
2.- China
Dos decisiones tomadas por el gobierno saliente vuelven a generar tensiones entre ambas potencias, una es el levantamiento de restricciones entre diplomáticos de Estados Unidos y Taiwán, una política que llevaba décadas activa.
A pesar de que EE.UU. no mantiene relaciones formales con la isla, el gobierno de Trump aumentó su respaldo hacia ellos con ventas de armas y legislación para que puedan gestionar de mejor manera la relación con Pekín.
“La administración Biden estará legítimamente descontenta con que una decisión política como esta se realice en los últimos días de la de Trump”, explicó Bonnie Glaser, experta en la relación sino-estadounidense, en Reuters.
El otro golpe para China fue durante el último día de la presidencia de Trump, quien calificó como “genocidio” las acciones que Pekín cometió contra la etnia Uigur de Xinjiang, además de cometer “crímenes contra la Humanidad”.
3. Irán
Hace un par de días Mike Pompeo acusó a Irán de ser “la nueva sede central” de Al Qaeda y que tendrían estrechos vínculos con este grupo terrorista, a pesar de no aportar pruebas.
Además, a esto se le suma el anuncio del Departamento de Estado, quienes declararán a los rebeldes hutíes de Yemen como una organización terrorista, una acción que podría agravar la crisis humanitaria en el país.
Los hutíes (apoyados por Irán), están luchando desde 2015 contra una coalición liderada por Arabia Saudita en Yemen. Guerra que ha desencadenado una de las peores crisis humanitarias del mundo y a la que Biden ha dicho quiere terminar.
