La segunda ola de coronavirus está afectando a muchos países europeos, entre ellos España, Francia, Reino Unido y Alemania. Este último prepara el cierre de bares, gimnasios, museos y actividades culturales, se mantienen abiertos lugares como restaurantes (solo con comida para llevar), colegios y comercios.
Angela Merkel, canciller alemana, sostiene que si las restricciones se respetan se puede romper esta nueva ola de contagios, de funcionar diciembre será “soportable”.
“Depende de todos nosotros que este noviembre sea un éxito colectivo y un punto de inflexión para el rastreo de la pandemia”, explicó Merkel.
Alemania acumula 560.369 casos desde el inicio de la pandemia, con 10.573 fallecidos, donde los contagios se han triplicado las últimas dos semanas.
“Es un crecimiento exponencial, que nos lleva a enfrentarnos a una situación de emergencia aguda en nuestros hospitales a un ritmo cada vez mayor”, agregó la líder, que enfrenta además la disminución de temperaturas.
Otro de los problemas que el país enfrenta es que no se sabe dónde se producen el 75% de los contagios, por lo que la canciller alemana planea reducir ese número a 50%, donde las oficinas de salud pública pueden garantizar la trazabilidad.
