Durante la tarde de este martes en Beirut, Líbano, dos explosiones sacudieron la ciudad, las que se originaron en la zona portuaria.
La segunda de ellas (la más grande) fue provocada por 2.750 toneladas de nitrato de amonio que estaban almacenados sin la seguridad suficiente desde hace seis años.
Como resultado, más de 100 personas han fallecido y los heridos suman más de 4.000, además de los diversos daños infraestructurales en la ciudad.
¿Qué es el nitrato de amonio?
Es un compuesto químico formado por amoníaco y ácido nítrico que se utiliza principalmente como fertilizante, debido a su alta concentración de nitrógeno.
Visualmente es una sustancia como sal blanca y que no tiene olor.
El producto no es combustible, pero sí puede explotar si está en dosis medias a altas y es expuesto a una fuente de calor intenso o se mezcla con combustibles, por lo que almacenarlo debe seguir estrictas normas de seguridad.
Debido a lo anterior, también puede usarse para fabricar explosivos. Esto fue lo que se usó en el ataque contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994 y que provocó 85 víctimas fatales.
En Beirut también se identificó nitrato de sodio, otro compuesto químico usado en combustible de cohetes y explosivos militares, el cual había sido confiscado de un buque un año antes.
Otros estragos causados por el nitrato de amonio
En 1921, un silo con 4.500 toneladas de sulfato de amonio y nitrato de amonio explotaron en la empresa química BASF en Alemania, lo que causó 561 fallecidos.
Hacia 2001, 300 toneladas de nitrato de amonio dejaron 31 fallecifos cuando un hangar de la planta AZF explotó en Toulose, Francia. Y algo similar ocurrió en Texas, Estados Unidos en 2013, con 15 fallecidos.
También fue el compuesto utilizado en un atentado en 1995, por parte del supremacista blanco Timothy McVeigh, quien detonó una bomba frente a un edificio federal en Oklahoma y que provocó 168 muertos y 700 heridos.