Este martes dos explosiones ocurrieron en la zona portuaria de Beirut, capital de Líbano, las cuales se registraron en un almacén de material altamente explosivo que había sido confiscado.
Michel Aoun, el presidente de la nación, escribió en Twitter que era “inaceptable” que 2.750 toneladas de nitrato de amonio estuvieran guardadas de forma insegura, el cual estuvo allí durante seis años.
El evento sucedió a las 18:15 hora local (11:15 en Chile), medios internacionales informaron sobre estructuras derrumbadas cerca de la zona y diversos daños a lo largo de la ciudad.
Según la información de BBC, el estruendo se escuchó en la isla de Chipre, a 240 kilómetros de ocurrida la explosión.
Por el momento se habla de más de 135 fallecidos y al menos 5.000 heridos. El ministro de Salud de ese país, Hamad Hasan, informó que los hospitales están llenos o tienen algún grado de destrucción.
Una investigación se está llevando a cabo para determinar cuáles fueron las causas exactas que detonaron la explosión.
El Consejo de Defensa Supremo del Líbano sostuvo que los responsables enfrentarían el “máximo castigo” posible.
En primera instancia se creyó que podía ser un atentado, pero las fuerzas de defensa de Israel sostuvieron que no estaban involucrados, y por otro lado, el partido Hezbolá también descartó su responsabilidad, a pesar de que durante estos días algunos de sus miembros se encuentran en juicio por la muerte del primer ministro Rafik Hariri en 2005.
Líbano vive una de sus peores crisis económicas, con una depreciación de la moneda, hiperinflación y masivos despidos, lo que ha generado un gran malestar social durante el último tiempo.
Aquí algunos registros de la explosión:
Imágenes sensibles
Beirut: Continúa la búsqueda y rescate de desaparecidos tras la explosión