Desde el inicio de la pandemia, la hidroxicloroquina se posicionó como uno de los posibles medicamentos hacer un tratamiento, a pesar de no existían pruebas científicas que lo validaran.
El interés en esta medicina surgió debido a los estudios realizados en el coronavirus anterior, el SARS del año 2003.
En las últimas semanas, un estudio indicó que no tiene efectividad en el tratamiento de Covid-19, por lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS), suspendió todos los ensayos.
¿Qué es la hidroxicloroquina?
Es un derivado mejor tolerado de la cloroquina, utilizado para tratar la malaria y enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide o el lupus.
Bajo prescripción médica e indicaciones aprobadas son seguros, pero como todos los fármacos, puede provocar efectos secundarios e incluso resultar tóxico.
Estudio que lo descarta
La investigación más reciente publicada en The Lancet bajó drásticamente las expectativas este medicamento, el cual se realizó en 96.000 pacientes contagiados de Covid-19 de 671 hospitales de todo el mundo.
Las personas estudiadas, aparte de no mejorar, tuvieron problemas cardiacos y una mayor mortalidad.
Debido a esto, la OMS suspendió los ensayos clínicos con hidroxicloriquina, solicitaron revisar los datos disponibles y evaluar los riesgos.