Desde diciembre del 2019, en la Comunidad de Madrid se prohibió el uso de celulares para el período escolar 2020-2021, a través de un cambio normativo encaminado a la mejora de resultados académicos de los alumnos y con el fin de combatir el ciber acoso y bullying. Ahora, las autoridades regionales de esa zona anunciaron que ampliarán esta limitación a los recreos.
Las excepciones a la restricción del uso de teléfonos móviles sólo son en casos donde su uso esté previsto en el proyecto educativo o para alumnos que los necesiten por cuestiones de salud o discapacidad. Junto a Galicia, la Comunidad de Madrid son las únicas regiones de España que han adoptado la prohibición de smartphones. Pero no son los primeros en hacerlo en Europa. Años atrás Francia también prohibió el uso de celulares, decisión que fue muy aplaudida por la comunidad francesa.
“Demonizar y prohibir los móviles en los colegios es como querer poner puertas al campo“, opinó Alba Torrego para ABC, Doctora en Educación y profesora de la Universidad Complutense de Madrid. “Seguimos recurriendo a la prohibición como posible solución a todos los problemas relacionados con el uso de nuevos dispositivos. Para poder vivir en esta sociedad, marcada por la cultura participativa digital y por la necesidad de ser competente digitalmente, hace falta introducir la educación para el uso de los medios en las escuelas”, continuó la profesional.
La educación comienza en casa
Según variados profesionales, la primera instancia donde la educación digital fracasa es en la familia. Aunque gran parte de las nuevas generaciones sean de nativos digitales, los niños no nacen sabiendo usar tecnologías, por lo que el llamado es a educar a los progenitores para alcanzar el “bienestar digital”.
Pantallas Amigas es una iniciativa que tiene como misión la promoción del uso seguro y saludable de Internet, además del fomento de una ciudadanía digital responsable en la infancia y la adolescencia. Jorge Flores es el director de este proyecto y considera que debe procurarse cautela con el uso excesivo de nuevas tecnologías, puesto que se asocia con “problemáticas de aislamiento, conflicto familiar y déficit de desarrollo de ciertas capacidades”.
“Dar o no un móvil debe ser una decisión que debe ser tomada de manera informada, sin presiones y meditada. Actualmente creo que esto no está siendo así y se entregan móviles de forma irresponsable”, comentó Flores.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) de España, un 66% de los menores españoles entre 10 y 15 años tiene teléfono móvil: 84% en el caso de menores con 13 años; al 92,5% con 14 años; y al 93,8% con 15. Con respecto a los menores de 10 años, solo el 22,3% tiene móvil.
Integrar el teléfono al aula
El nuevo reto, según numerosos expertos, es incorporar el smartphone a la sala de clases con el objetivo de complementar la educación en la línea de su buen uso. Desde la plataforma educativa InspiraTICs comentaron que los docentes pueden aprovechar las ventajas de los celulares para enseñar, convirtiéndolo en un medio más para el aprendizaje.
Por su parte, el Departamento de Educación de Cataluña implementó un nuevo programa “Mòbils.edu”, con el fin de contribuir a la mejora de competencias digitales en el alumnado a través del uso educativo de los dispositivos móviles. Un total de 100 centros educacionales se han incorporado a este programa desde el período 2019- 2020.
“Mòbils.edu” se basa en un modelo BYOD -bring your own Device-, que quiere decir que el estudiantado se lleva al aula sus dispositivos móviles personales, dado que están más familiarizados, aunque el departamento facilita también dispositivos en los casos pertinentes.
El programa enseña cómo hacer radio y televisión con dispositivos móviles para trabajar la competencia comunicativa; se potencian los móviles como herramienta de investigación, exploración y creación artística; como laboratorio, para proyectos de ciencia o ciudadanía; y se trabaja con metodologías integradas como gamificación, Flipped classroom, enfoque STEAM o el aprendizaje a distancia. Todo ello ha requerido de una formación específica del profesorado. De esta manera, se incentivan ejemplos de buenas prácticas en el uso de celulares.
Francia marca un precedente y prohíbe el uso de celulares en escuelas para menores de 15 años