Orcas y belugas liberadas tendrán un santuario en Canadá
Tras la promulgación de una ley que impide la reclusión de cetáceos, miles de estos animales quedarán libres y en busca de refugio. Por lo mismo, habrá uno en la costa de Nueva Escocia que los pueda proteger.
El Whale Sanctuary Project es una organización estadounidense enfocada en crear santuarios en costas marítimas donde cetáceos (como ballenas y delfines) puedan vivir. Según indican ellos mismos en su sitio, su objetivo es garantizar “un ambiente que mejore el bienestar y la autonomía de estos animales”. Además de “acercarse lo más posible a su hábitat natural”.
Esta es la primera organización de este estilo en crear santuarios en América del Norte. Y ahora, tras un extensivo análisis de un grupo de expertos que duró más de dos años, se anunció que habrá uno en Port Hilford, que queda al este de Canadá. Según señala Charles Vinick, director ejecutivo de esta entidad, “es un sitio ideal para las ballenas procedentes de parques marinos y acuarios”.
Este lugar dará albergue únicamente a orcas y belugas que hayan estado en acuarios o parques acuáticos y hayan quedado en libertad, la misma que vendría luego que se aprobara una ley en junio pasado que prohíbe su reclusión. Ocupará 40 hectáreas en la bahía y acogerá a ocho cetáceos. Porque estos animales carecen de habilidades que le permitan la autosuficiencia, tendrán que ser alimentados por el personal de la organización.
Los primeros mamíferos llegarán a finales de 2021 y, al llegar, contarán con un centro de interpretación y educación para cetáceos. Y, para poner en marcha esta iniciativa, ha habido una campaña de recaudación de fondos que ha estado reuniendo el dinero que hace falta. Esto son entre 12 y 15 millones de dólares.
Es importante que estos animales se encuentren en un lugar seguro. Esto pues, según dijo Lori Marino, presidenta de Whale Sanctuary Projet, “son muy inteligentes, de gran sensibilidad y socialmente complejos. En los confines de un tanque de concreto en un parque marino sufren estrés crónico y, a menudo, enfermedades mortales. Reubicarlos en un entorno oceánico les dará una vida más saludable”.