El adiós a Armando Uribe: El poeta y mordaz observador de la realidad
Este jueves, el Premio Nacional de Literatura 2004 falleció debido a una insuficiencia respiratoria.
Este jueves 23 de enero, a los 86 años murió el poeta, abogado y político Armando Uribe. El Premio Nacional de Literatura 2004 falleció debido a una insuficiencia respiratoria.
El poeta nació en el 28 de octubre de 1933 en una familia de clase media. Uribe curso su etapa escolar en el Colegio Saint George y posteriomente ingresó en la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, recibiendo su título de abogado en 1959.
Tras recibirse, se desempeñó como profesor en diversas Universidades, entre ellas la Universidad Católica de Chile, la Universidad Estatal de Míchigan (Estados Unidos), la Universidad de Sassari (Italia) y la Universidad de París I Panthéon-Sorbonne (Francia).
Entre 1967 y 1973, el abogado cumplió funciones diplomáticas, siendo ministro consejero de la embajada de Chile en Estados Unidos entre 1968 y 1970 y embajador de Chile ante la República Popular China en el gobierno de Salvador Allende en 1971.
Después del golpe militar de 1973, Uribe rechazó el gobierno de Augusto Pinochet y fue destituido, exiliándose con su familia en Francia.En 1990 regresa a Chile, y disminuye su actividad social, llegando a ser mínima en 1997.
En 2002, Uribe obtiene el Premio Altazor por la obra “A peor Vida” en la categoría de poesía y por “Fantasma de la Sinrazón y el secreto de la poesía” en la categoría de ensayo.
En 2004 le otorgan el Premio Nacional de Literatura de Chile por el conjunto de su obra.
Uribe falleció el mismo día en que se cumplen dos años de la muerte del antipoeta, Nicanor Parra.
Algunas frases para recordar a Armando Uribe
Aunque no crea en Dios, un Dios me crea.
Te amo y te odio. Dirás cómo es posible. No sé. Yo te amo y te odio.
Las ganas de morir y las de amar son mellizas que me aman.
Yo soy el eco, tú eres la palabra.
Camines donde camines, adonde camines, caminarás a la tumba, caminarás en la tumba.
En la poesía hay algo distinto a la conciencia, y que la supera sin eliminarla del todo.
Hoy estamos anclados, soy gaviota, mi cara es marinero sin trabajo, y el corazón espera, espera un signo, la mujer que no está, mi amor sin ojos.
La dictadura no fue un error, tiene apellidos, como colas de rata o lagartija, y su elenco de honor para asesinos los regocija todavía, y dura indefinidamente; no fue un malentendido sino la voluntad de pasar una lija de hierro por encima de los niños.
Un repaso por su vida notable
En la voz de Bárbara Espejo, repasamos las diversas etapas de su vida, desde su amor notable con Cecilia Echeverría hasta sus cartas más oscura.
El amor notable entre Armando Uribe y Cecilia Echeverría
Armando Uribe I: “Declaro no haber sido niño”
Armando Uribe II: Las mañas de un poeta
Armando Uribe III: El Quijote y la trenza de Cé
Armando Uribe IV: “Nací asesinado”