China revela los primeros secretos del lado oculto de la Luna: Encontraron restos de un mar de lava
Según los científicos, el hallazgo “puede cambiar nuestra visión sobre los interiores planetarios”.
Desde principios de este año un pequeño robot chino está recorriendo un enorme cráter en la cara oculta de la Luna. Se trata de una fosa creada por el impacto de un meteorito de 170 kilómetros hace unos 3.900 millones de años, y que por primera vez es analizada por humanos.
Como era de esperar, esta misión, que es la primera en aterrizar con éxito en la cara oculta de la Luna, está aportando significativos descubrimientos. Por ahora, los científicos chinos creen haber encontrado restos del manto lunar, la capa interna que se oculta bajo la corteza del satélite natural y de la que hasta ahora ni siquiera había evidencias.
Para contextualizar la importancia de estos indicios, en El País explican que la Luna es un pedazo de la Tierra que se desprendió debido al impacto de Theia, un asteroide del tamaño de Marte, hace unos 4.500 millones de años. “Una pequeña parte salió despedida y se mezcló con los restos de Theia, convertidos en roca fundida tras el golpe. Durante un tiempo el satélite quedó cubierto por un océano de lava ardiente en el que los materiales más pesados fueron cristalizando en el fondo y los más ligeros quedaron en la superficie, de donde los primeros astronautas recogieron abundantes muestras en las décadas de 1960 y 1970. Desde entonces ha sido un misterio cuál es la composición de la Luna más allá de su capa más externa“, detalla el artículo.
“Yutu-2”, el robot chino que está desarrollando esta pionera misión, al parecer tendría datos de la composición de la capa más interior de la Luna, conocida como manto lunar. El dispositivo tecnológico aterrizó en Aitken, el cráter más importante de los tantos que hay en lado oculto de la Luna, formados durante una violenta etapa de la historia del sistema solar conocida como bombardeo intenso tardío. Justamente en Aitken este bombardeo fue tan fuerte que penetró más allá de la corteza lunar y destapó el manto esparciendo su contenido por la superficie.
En un estudio publicado en la revista Nature, científicos de la Academia Nacional de Ciencias de China explican que “Yutu-2” muestra que la composición del terreno es diferente a la del lado visible del satélite. Los minerales analizados tienen un alto contenido de olivina y otros compuestos densos que podrían corresponder a las capas más profundas del mar de lava.
“Estos podrían ser los primeros indicios claros del manto lunar que salieron a la superficie tras el enorme impacto que formó la cuenca Aitken”, adelanta Bernard Foing, director del Grupo de Trabajo para la Exploración Lunar de la Agencia Espacial Europea, que colabora con China en esta misión.
Los datos recabados “pueden tener implicaciones importantes para determinar la composición del manto externo”, además de revelar la “profundidad, velocidad de enfriamiento y viscosidad” del viejo mar de lava que cubría la Luna. Según Patrick Pinet, del Instituto de Investigación de Astrofísica y Planetología de Francia, la información “también puede cambiar nuestra visión sobre los interiores planetarios”.
“Es muy importante desvelar la geología de la cara oculta de la Luna, lo que aumentará nuestro conocimiento sobre la formación de la Luna y las diferencias entre sus dos caras”, dijo Pinet.