La llegada de los scooters eléctricos abrió una alternativa para quienes se mueven a través de las calles de Santiago, pero también ha generado un aumento en los accidentes.
Un informe realizado por el Centro Médico de la Universidad de San Diego en EE.UU. reveló que casi la mitad de los pacientes con lesiones producto de un viaje en este medio de transporte estaban ebrios y el 98% no usaba casco.
En el caso de nuestro país, según datos entregados por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) a Qué Pasa, los accidentes de vehículos motorizados de dos ruedas -mecánicos o eléctricos- registraron un incremento de un 27% en el último trimestre, respecto a igual fecha del año anterior.
Carabineros explicó que la normativa vigente señala que los scooters cuya potencia sea igual o inferior a 250 watts (0.25 kw) deben transitar por ciclovías o por la calle. Si bien las personas que utilizan estos medios de transporte se ven mayoritariamente circulando por la vereda, por desconocimiento de la norma o por seguridad, no deberían hacerlo por la velocidad máxima a la que llegan estos vehículos, que alcanza entre los 25 a 30 km por hora.
“Con los scooter públicos, que son utilizados por diversos usuarios, se ve una baja en los elementos de protección como el uso de casco, que es súper importante no solo porque reduce las lesiones en caso de accidentes, sino porque un pequeño hoyo en la calzada hace perder el equilibrio, al igual que los detalles de las rejillas del alcantarillado” comentó Rodrigo Cruces, especialista en seguridad vial de la ACHS en la publicación.
Según cifras de la ACHS, al año ocurren 18.700 accidentes de trayecto (recorrido de la casa al trabajo o viceversa) los que corresponden al 80% de los accidente anuales y de los cuales el 60% ocurre entre las 6:00 y las 9:00 horas. Los principales afectados son hombres entre los 20 y 40 años.
Luis Herrada, Jefe de Urgencia y Rescate de Clínica Las Condes manifestó que “todos estos sistemas son buenos y tienen muchas ventajas, pero pueden ser muy peligrosos cuando no hay cultura de seguridad vial. Son pocos los casos que no usan cascos, idealmente si la persona se va a subir a un scooter la protección debe ser completa”.