El desarrollo de una nueva técnica logró convertir el CO2 de los gases de efecto invernadero en carbón sólido. Esto significa un gran avance en el manejo y eliminación de estos desechos.
Según el estudio publicado en la revisa Nature Communications, este método permitirá que el compuesto pueda ser trabajado de una forma mucho más eficiente.
Las tecnologías actuales para deshacerse del CO2 contaminante se enfocan en captar y almacenar el carbono para luego transformarlo en líquido e inyectarlo bajo tierra.
Esta actividad se ha visto amenazada debido a los grandes costos y las preocupaciones ambientales que generan las posibles fugas, por lo que es menos sostenible.
¿Cómo funciona este nuevo método?
Los investigadores líderes de este proyecto, pertenecientes a la Universidad RMIT de Melbourne, diseñaron un catalizador de metales líquidos, que a través de reacciones químicas logra convertir el CO2 en carbón sólido.
Hasta el momento la única forma en que se puede realizar el mismo proceso es sometiendo a este gas a muy altas temperaturas, lo que lo hace inviable de manera industrial.
¿Qué se hará con el carbón obtenido?
Se espera que, gracias a esto, el CO2 pueda convertirse en carbón a una gran escala, el que luego será enterrado bajo tierra.
Lo anterior, fue considerado por los expertos como algo mucho más sostenible, que además contribuye a la disminución del efecto invernadero.