Fiel a su estilo reformador, el Papa Francisco se convirtió en el primer Pontífice en visitar la península arábiga, cuna del islam, para reunirse con líderes musulmanes y mostrar su interés por encontrar una salida pacífica a los conflictos que ocurren en esa zona del mundo.
En un hito histórico, Francisco acudió al encuentro interreligioso “Conferencia de Fraternidad Humana” en Abu Dabi, Emiratos Árabes, que reúne a 700 representantes de diferentes confesiones religiosas, encabezados por musulmanes y cristianos. Allí, aprovechó de hacer hincapié en su preocupación por la crisis humanitaria que se vive en Yemen e hizo un llamado a terminar con el terrorismo.
“No hay violencia que encuentre justificación en la religión”, expresó durante la conferencia.
Entre otros actos, que incluyeron la entrega de un medallón que representa un encuentro en 1219, en plena Cruzada, entre San Francisco de Asís y el sultán Malek al Kamel en Egipto, el Papa firmó un documento sobre la lucha contra el extremismo e intercambió una declaración conjunta sobre la “fraternidad humana” con el gran imán de la mezquita Al-Azhar de Egipto, Ahmed al-Tayeb, el que fue sellado con un afectuoso saludo.
El viaje del Papa Francisco terminará este martes 5 de febrero con la realización de la primera misa papal de la historia en Emiratos Árabes Unidos, en un encuentro al que se espera que asistan unos 135.000 católicos en la cuna del Islam, según publica El País.