La denominada “Guerra de la leche” en Chile ha estado marcada por campañas en redes sociales a favor y en contra de diferentes empresas.
Estás campañas buscan que los consumidores prefieran principalmente productos de la marcan Colún, por sobre Soprole, Nestlé y Watt’s, esto ante la denuncia de que las multinacionales están excluyendo a la cooperativa del mercado y bloqueando su publicidad.
En junio de 2017 un grupo de diputados denunció ante la Fiscalía Nacional Económica a Soprole, Nestlé y Watt’s por colusión debido a que los precios con los cuales compran a los pequeños productores han bajado un 22% desde 2015, mientras que el valor de sus productos ha subido un 8%.
Por su parte, en abril de este año el gerente general de Watt’s, Rodolfo Véliz, hizo un llamado a las autoridades a “emparejar la cancha”, acusando una supuesta distorsión tributaria en el mercado lechero que favorecería a Colún (Cooperativa Agrícola y Lechera de La Unión), empresa que no paga impuestos corporativos.
Para ello, ingresó una consulta en el Tribunal de la Libre Competencia (TDLC) con argumento de la obligación que desde 2004 tienen las firmas de publicar sus listas de precios de compra de leche a los productores, con excepción Colún.
Sin embargo, la FNE desestimó los argumentos de Watt’s asegurando que Colún “es una cooperativa verticalmente integrada, por lo que no compra leche, sino más bien recibe la misma proveniente de sus asociados. Por ello, no compite en la recepción de leche al menos en el corto plazo, pues el proceso de admisión de nuevos asociados requiere de al menos un año“.
Lo que alega Véliz es que además de que Colún no publique sus listas de precios existen ventajas tributarias para esa empresa y explicó que anualmente genera US$600 millones y obtiene utilidades por unos US$80 millones, que están exentos del pago de aranceles.
Frente a esto, Watt’s ha solicitado que se revise la Ley de Cooperativas, para así ponerle un límite a las “ventajas” que tienen empresas como Colún.
La defensa del Movimiento Social Patriota a favor de Colún
Si bien este conflicto había permanecido al interior del Congreso, se traspasó a la sociedad cuando el Movimiento Social Patriota (MSP), de carácter nazi , hizo un llamado a boicotear a Soprole.
A través de sus redes sociales el MSP ha hecho este llamado “por ser antinacional, por promover el descontrol migratorio, por vender leche reconstituida, por dañar a los productores chilenos. Prefiere los productos nacionales como Colún y Surlat”.
#BoicotASoprole Por ser antinacional, por promover el descontrol migratorio, por vender leche reconstituida, por dañar a los productores chilenos. Prefiere los productos Nacionales como #Colun y #Surlat . #SocialPatriotas #DefiendeChile #ChilePrimero pic.twitter.com/dyoWwG5e9Q
— Mov. Social Patriota (@movs_patriota) 11 de agosto de 2018
Leche reconstituida y leche natural
El Ministerio de Salud establece el reglamento sanitario de los alimentos, el que rige, entre otras cosas, la producción, importación y distribución de comida.
Sobre esto, la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, explicó que “la leche natural es aquella leche que solamente ha sido pasteurizada, la leche reconstituida son las leches en polvo que se les agrega agua, y la leche en polvo es aquella que se le ha deshidratado y se le ha retirado el agua”.
En conversación con CNN la nutrióloga de la Clínica Santa María, Ana Claudia Villarroel, señaló que “todo alimento que uno le haga cualquier tipo de modificación va a perder ciertos componentes (…), sin embargo, los aportes de vitaminas y minerales, van a permanecer prácticamente intactos”.