El 60% de los chilenos gasta más de lo que gana: ¿En qué se nos va el dinero?
La VIII Encuesta de Presupuestos Familiares del INE también arrojó que el gasto promedio mensual de las familias se elevó en un 19,2% entre los años 2012 y 2017. Lo que se contrasta con el 16,4% que aumentaron los ingresos en el mismo periodo.
Que el ingreso de la familia no alcance para llegar a fin de mes es algo que la mayoría de los hogares en Chile han experimentado. No es un mito, es una realidad que muchos enfrentan día a día.
Así lo demuestran las cifras entregadas por la VIII Encuesta de Presupuestos Familiares del INE, que, entre otros datos, apuntan a que el 80% de las personas gasta más de lo que gana.
Cuando hablamos de la relación ingresos/gastos en la dimensión de los hogares, vemos que en el primer quintil, que es el más pobre, el ingreso es de $358.181 frente a un gasto de $595.144. Que en el segundo quintil los ingresos son de $610.100 versus $743.260 de salida. Y que en el tercer quintil la cifra recién comienza a equilibrarse, con un ingreso de $854.635 y gastos por $876.521.
Estos tres quintiles representan al 60% más vulnerable de la población del país.
El director del INE, Guillermo Pattillo, explicó a La Tercera que “el proceso de crecimiento económico y desarrollo a largo plazo van modificando los resultados. Este es un antecedente que nos ubica en el estado de desarrollo que es consistente con lo que es nuestro PIB per cápita y los programas que la autoridad tiene de redistribución de ingresos”.
¿En qué nos gastamos el dinero?
El estudio muestra que el gasto promedio mensual de las familias aumentó un 19,2% entre el 2012 y 2017. Pasando de $940.964 a $1.121.925. Y, de la misma forma, explica que este gasto es superior a los ingresos, que crecieron en promedio un 16,4%: de $1.025.313 a $1.193.456.
Al fijarse en qué gastan sus ingresos las familias mensualemente, resaltan en primer lugar los alimentos y las bebidas no alcohólicas (como jugos o gaseosas). Estas significan un gasto promedio de $209.983. Le sigue el transporte, con gastos que ascienden a los $170.238. Y, en tercer lugar, se ubica vivienda y servicios básicos, con una suma de $160.692.
Uno de los ítems que llama la atención en este sentido, es el descenso del gasto en educación en los últimos cinco años, que significó una baja de 1,4 puntos porcentuales, llegando a los $72.596.
En contraposición, los gastos asociados al tiempo libre tuvieron un crecimiento. Por ejemplo, el gasto en hoteles y restaurantes aumentó en 2,3 puntos porcentuales por persona, lo que significa una suma de $73.096. Así mismo, cultura y recreación llegó a la cifra de $76.167.