El cómo ocurrieron los hechos que tienen hace siete meses presos en Malasia a Felipe Osiadacz y Fernando Candia, es confuso.
El incidente por el que podrían ser juzgados con ir a la horca, se dio en la madrugada en el hotel donde se estaban quedando de vacaciones. Al parecer eran perseguidos por un malasio, con el que se enfrascaron en una pelea, y que finalmente resultó muerto.
No hay más detalles de los hechos, porque las familias de ambos jóvenes no han querido hablar por temor a disminuir aún más las posibilidades que los chilenos tienen de ser condenados con la pena máxima.
Según relató a La Tercera el senador Francisco Chahuán, a quien el padre de uno de los chilenos recurrió para hacer lo posible para rgeresarlos, en Malasia “no se han respetado las garantías procesales. Han estado privados de libertad siete meses en condiciones de precariedad y, además, se va a iniciar un juicio. Por lo menos, de los testimonios en que he recibido del padre, me señalan que existe un video del lugar en el que se habría producido la muerte, y ellos habrían actuado en legítima defensa”.
Como declaró Samuel Fernández, ex embajador de Chile en la ONU, una de las vías que se podría seguir es la diplomática, y según dijo en Publimetro, “si todo sale pésimo, existe una posibilidad: ver si es que el proceso cayó en un hecho de violación al debido proceso y a los Derechos Humanos. Eso se puede denunciar ante organismos internacionales. Existe esa posibilidad pero solo en caso de que todo salga muy mal”.
Según dijo el canciller Roberto Ampuero, “estamos atendiendo, asistiendo a estos dos chilenos. Existe desde el primer día una asistencia consular que se ha ocupado de estas personas, estamos siguiendo atentamente este asunto y lo vamos a seguir haciendo”.
El principal problema es que la ley en Malasia no distingue entre un homicidio con o sin intención.
Foto: CNN