Se concretaron las amenazas. Durante la madrugada de este sábado, Donald Trump ordenó una ofensiva militar contra Siria en conjunto con Reino Unido y Francia.
La operación se llevó a cabo como respuesta al ataque con armas químicas en la localidad de Douma (donde murieron al menos 50 personas) que estos países atribuyen al régimen de Bashar al Assad.
Los misiles tuvieron destino en objetivos como un centro de investigación militar y depósito de armas químicas en la ciudad de Homs, en el centro de Siria, y un centro de investigación científica cerca de Damasco, donde según los norteamericanos se desarrollaban armamentos químicos y biológicos.
Así mismo, aviones franceses y británicos completaron “ataques exitosos” contra instalaciones de armamento militar del Gobierno sirio.
Esta es la segunda ofensiva militar por parte de Estados Unidos contra Siria en menos de un año. La vez anterior, Donald Trump destruyó una base miliar con 59 misiles Tomahawk, también justificado por un ataque químico que dejó al menos 86 muertos.
Crédito de las fotos: AFP y AP.