De acuerdo a lo informado por el hospital clínico de la UC, el arzobispo de Malta, Charles Scicluna -quien fue designado por el Papa Francisco recoger los testimonios de las víctimas de Fernando Karadima en el marco de la investigación por un posible encubrimiento del obispo Juan Barros- permanecerá internado hasta el fin de semana.
Esto debido a que tuvo una cirugía laparoscópica por una inflamación de la vesícula.
El arzobispo no podrá seguir con la ronda de entrevistas que tenía previstas, pero su labor la continuará en manos del sacerdote español Jordi Bertomeu, quien hasta ahora oficiaba como notario del caso.