En una carta dirigida al Tribunal Supremo de la Democracia Cristiana, el ex ministro de Salud del gobierno de Ricardo Lagos, Pedro García, anunció su renuncia al partido.
“Para facilitar vuestra decisión y actuar les comento que con mucho dolor he decidido renunciar a la estructura del PDC (Partido por la Democracia), cosa que formalizare en las próximas horas. Esperé ver señales más inspiradoras que me dieran esperanza de que se pudiera reconstituir un ánimo societario distinto al imperante, pero todo indica que este se va a agudizar y que malas prácticas de presión se van a entronizar. Espero muy sinceramente estar equivocado, pero no estoy disponible a seguir siendo violentado por pensar distinto”, señaló García en el comunicado.
Sobre la petición de renuncia, el ex titular de Salud comentó que muchos “han preferido privilegiar el prejuicio y la post verdad, para iniciar persecuciones impropias de un grupo pensante serio y responsable. La intolerancia y la incoherencia en el proceder se ha adueñado de nuestro PDC: también en otros partidos políticos ocurre lo mismo”.
Agregando que “la búsqueda del poder ha enceguecido a varios sobre la real función de la política”.
Tras la victoria de Sebastián Piñera explicó que “es evidente que ese 55% de aprobación no es solo votación de Derecha. Mucha gente que históricamente votaba Concertación, y fundamentalmente DC, votó Piñera. Esa debiese ser la discusión y el análisis y no la persecución de quienes hemos hecho un análisis distinto”.
El también ex concejal de Santiago aseguró haber sido “un leal y dedicado militante del PDC, cumpliendo cabalmente y rigurosamente con sus principios y valores (…) me siento absolutamente orgulloso de lo hecho y avanzado en los gobiernos de la Concertación”.
Frente a a su pensamiento sobre la coalición saliente dijo que no comparte “esa lógica refundacional tan propia de la Nueva Mayoría y que hoy se está pagando caro. Creo tener derecho a decirlo cuantas veces quiera; para eso arriesgue mi vida en Dictadura. No me gustan, y desconfío profundamente, de quienes no toleran la crítica y la anulan con presiones indebidas”.