En el marco del Caso Caval, el fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, pidió la investigación al Servicio de Impuestos Internos, de boletas presuntamente falsas de Sebastiájn Dávalos, hijo de la presidenta Michelle Bachelet.
Esto, como publicó El Mostrador, después de que Mauricio Valero, uno de los socios de Caval, diera cuenta de boletas que emitió Dávalos en 2012 por más de $10 millones cuando era funcionario de la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores, por la elaboración de informes a Gonzalo Vial, quien ingresó la querella por estafa.
José Antonio Kast, vinculó las nuevas diligencias con los dichos del oficialismo ante la acusación de Sebastián Piñera de votos marcados en las pasadas elecciones y expresó: “vemos como curiosamente comienzan con ataques muy virulentos contra Sebastián Piñera. Uno siempre lo espera de la izquierda, pero aquí claramente hay una mano distinta y es la mano de Michelle Bachelet”.
Y aseguró: “Está tratando de proteger una vez más a su hijo. Ayer nos enteramos que su hijo va a ser querellado -si creemos en la independencia del SII- por estafa en el caso Caval (…) Y así se entiende toda esta virulencia el día de ayer contra Piñera porque quieren levantar una cortina de humo para proteger al hijo de la Presidenta y dejarlo impune”.
E incluso fue más allá al declarar que a Bachelet “le interesa que salga Alejandro Guillier para que al igual que Giorgio Martelli y Rodrigo Peñailillo, que no fueron sancionados por el uso de platas ilegales para su campaña, tengan la impunidad”.