La ONG internacional Animal Libre solicitó hace un par de semanas al Ministerio de Salud, al Colegio de Nutricionistas y al Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) de la Universidad de Chile que tomaran una postura frente a la dieta vegana, que no acepta el consumo de alimentos de origen animal como queso, leche y huevos.
El Ministerio de Salud -el primero en responder a través de una carta- admitió los “beneficios del consumo de alimentos de origen vegetal (frutas, verduras, cereales y legumbres)”, destacando que no se opone a “la dieta vegetariana o vegana”, aunque sugirió que sea controlada por un nutricionista.
Lorena Rodríguez, jefa de Nutrición y Alimentos del Minsal, comentó que “nuestra primera línea es que mientras más pequeño sea el menor, requiere de una dieta más equilibrada, con proteínas de buena calidad, ácidos grasos esenciales y micronutrientes como zinc, calcio, hierro”.
Mauricio Serrano, director de la ONG Animal Libre, agregó que “hace unos cinco años no se hubiese ni reconocido que esta dieta es viable”.
Por otro lado, Juan Francisco Cabello, neurólogo infantil de Clínica Las Condes y jefe del grupo de Enfermedades Metabólicas del INTA, comento que hay una enfermedad metabólica llamada acidemia metilmalónica que se ha asociado a madres veganas.
Es un cuadro neurológico grave que puede llegar a causar la muerte del bebé.
“Es uno de los riesgos. El déficit de vitamina B12 en adultos puede causar desde trastornos de la marcha hasta enfermedades psiquiátricas. La esquizofrenia también está relacionada con él. Si está bien controlado por un especialista en nutrición, con suplementos, los riesgos de enfermedades secundarias disminuyen, pero no llegan a cero”.
El próximo 1 de noviembre, se celebrará el Día Mundial del Veganismo. La ONG Animal Libre podrá celebrar su nuevo triunfo.