Jessica Flores, ex directora regional del Sename acusó a la Democracia Cristiana de intentar encubrir el “escandalo” del desfalco de $40 millones de pesos por parte de Noemí Betanzo, ex funcionaria de la institución.
En mayo la Seremi de Salud de Bío Bío emitió un informe en el que declaró inimputable a la ex jefa de finanzas del hogar Arrullo de Concepción.
Según el texto, al momento de producirse la apropiación de dineros, la inculpada presentaba “una severa ludopatía con un gran descontrol de impulsos”.
Betanzo “no poseía juicio ni discernimiento como para imputarle responsabilidad sobre los hechos investigados”, señaló la investigación.
Tras estudiar el texto la fiscal a cargo del sumario administrativo concluyó que no podía formularle cargos y propuso su sobreseimiento.
Ante esto Flores recordó que no sólo el Seremi de Salud, Mauricio Careaga, es militante de la DC, sino también la actual jefa del Sename en el Bío Bío, Rina Oñate. La ex directora también mencionó que la, ahora inimputable contadora, también milita en el partido.
Desde la Democracia Cristiana negaron categóricamente las acusaciones. Su presidente regional, Nicolás Hauri, aseguró que la colectividad de ninguna manera ha intervenido en el caso y que abogan porque se esclarezcan los hechos.
Según Betanzo el dinero lo perdió jugando en el casino, afirmación que está siendo investigada también por el Ministerio Público a través de una causa abierta tras la querella del Consejo de Defensa del Estado.
Hasta ahora la Fiscalía sólo aplicó cargos contra tres trabajadoras de menor rango en el servicio quienes tienen la posibilidad de apelar. Con ello podrían evitar cualquier sanción y el fraude al Fisco por $40 millones de pesos quedaría sin culpables.