El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) iniciará acciones legales en contra del autodenominado pastor Javier Soto. El motivo de la demanda es el episodio que se vivió en el programa “El Interruptor” conducido por José Miguel Villouta, donde Soto sacó una bandera de la diversidad sexual, la colocó como alfombra diciendo que solía hacerlo en todos lados y la pisoteó en señal de rechazo. La organización denunciará “actos violentos y homofóbicos”.
No es la primera vez que el “pastor” tiene conflictos legales con la institución, pues ya habría sido condenado en 2015 por injurias y calumnias hacia Rolando Jiménez, líder del Movilh, a una pena remitida de 300 días, lo que podría causar que en esta oportunidad se le condene a prisión efectiva por ser reincidente.
“Javier Soto es un peligro constante para el respeto a la dignidad de las personas, además de ser merecedor de nuestro máximo repudio por su constante violencia, la cual no toleramos” comunicó la organización.
El Movilh también llamó a Via X a explicar por qué eligió a Soto como entrevistado “sin siquiera un contrapunto, en el entendido de que el ejercicio pluralista de las comunicaciones y del periodismo trae consigo la responsabilidad social y el respeto a la dignidad de todas y todos”.
Revisa aquí la intervención de Soto en el programa de José Miguel Villouta