EN VIVO

Duna

Sonidos de tu Mundo

DUNA TV
PODCAST
Nada Personal
22 Noviembre
Terapia Chilensis
22 Noviembre
Aire Fresco
22 Noviembre
Santiago Adicto
22 Noviembre

Vulnerabilidad energética: Medio millón de hogares en Chile lo sufre, pero pocos lo ven

FOTO: Catalunya Vanguardista

El Ministerio de Energía aún debe fijar una definición para la pobreza energética. Además se busca cómo palear el efecto del alza de precios que causará el cambio climático. Aquí el análisis de Hablemos en Off.

Por:

19 Junio, 2017

Suscríbete a este programa

Chile, a nivel de costo de la energía, está en un puesto intermedio entre los de la OCDE con un precio de US$ 211 por MWh (al 2011), para los hogares, según un informe realizado por el Foro Económico Mundial.

En un hogar promedio (con un ingreso de 1.263.000 pesos), el gasto de luz es de $ 38.710, que sube a $ 63.150 si se le suma gas u otros combustibles para calefacción o cocina, alcanzando el 5,3% del ingreso. En un hogar del primer decil (el más pobre), donde el ingreso promedio es de $254.000, el gasto energético es de $ 24.130, o sea, el 9,5% de su ingreso. Estas cifras los dejan por debajo de la línea de la pobreza y de la pobreza energética, con altas probabilidades de que no reciban la energía necesaria.

Un análisis del Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la U. Católica (Clapes UC), basado en la última Encuesta de Presupuestos Familiares del INE y Casen, dio cuenta de que el 15,7% de los hogares chilenos, cerca de 480.000, se exponen a situaciones de vulnerabilidad energética. 

La vulnerabilidad energética, según el estudio, sería “la porción de los ingresos de los hogares que, después del gasto energético (sin considerar transporte), es menor al ingreso de línea de la pobreza”.

El mismo informe indica que esta vulnerabilidad está presente en hogares hasta del sexto decil. En el primer decil, un 66,8% de los hogares son vulnerables energéticamente. En el segundo, el 38,2% se encuentra en esa condición. En el tercero y el cuarto, la cifra alcanza 15,4% y 4,9% respectivamente.

Luis Edwin González, economista investigador de Clapes y autor del análisis, señala en La Tercera, que los hogares en dicha condición podrían aumentar con el tiempo:

“Cuando suban los precios de la electricidad, este número puede incrementarse, afectando sus ingresos. Todos los hogares que son vulnerables ante cambios en los precios de combustibles caerían en pobreza energética”.

Lo dicho por González se enmarca en que el cambio climático hará subir los impuestos al carbono, lo que consecuentemente podría generar un alza en los precios de la energía y así provocar que los hogares vulnerables gasten hasta un 20% del ingreso en energía. Un 60% de los gastos energéticos en los hogares vulnerables se destinan a electricidad, mientras que en el sector alto un 45%.

Anahí Urquiza, antropóloga coordinadora de la Red de Pobreza Energética de la U. de Chile e investigadora del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2), comparte que los gastos irán aumentando, pero agrega que la vulnerabilidad energética es un concepto más profundo que solo el gasto que se hace en energía en un hogar:

“En países como el nuestro, la calidad también es relevante, no sólo el tema de la equidad”.

Además agrega el tema de los contextos culturales y dice que “cuando se habla de la leña, por ejemplo, no es llegar y transformarles el tipo de calefacción, porque la cocina a leña también tiene una funcionalidad en la cultura del sur, que es el centro de reunión de la familia, hay temas que tienen que ver con costumbres. Para eso requerimos no solo estudios cuantitativos, sino estudios de casos, considerando contextos territoriales y culturales al menos”.

Por su parte, Andrés Rebolledo, ministro de Energía, dice que está trabajando junto al PNUD para poder definir la pobreza energética para así poder determinar las necesidades básicas que la energía debe satisfacer, ajustándose a los distintos espacios:

“La definición de pobreza energética es el primer paso para formular y focalizar políticas públicas adecuadas para abordar los problemas de acceso a la energía, como no contar con temperaturas adecuadas al interior de la vivienda, no tener acceso a agua caliente o no contar con suministro eléctrico.”

Exposición al frío

Según la Encuesta Nacional de Energía 2016, publicada en marzo, se supo que el 23% de los chilenos pasó frío el último invierno, lo que es una cifra alta comparado a otros países y considerando los estándares de temperatura en Chile.

Refiriéndose a esto, Urquiza señaló que “si traes europeos, dicen que pasan mucho más frío en Chile que en sus países donde hay nieve, porque el nivel de confort térmico al que estamos acostumbrados en los hogares es bajo, estamos acostumbrados a pasar frío. Pero la gente que dice pasar frío lo hace de forma mucho más crónica y eso tiene consecuencias importantes, sobre todo para la salud de personas vulnerables”.

Ahora, las personas que viven en situación de pobreza energética, no se exponen a enfermedades solo por el frío, sino también por el uso de combustibles de baja calidad para calefaccionar sus hogares.

Proyección de los precios

Según el análisis de Clapes UC, si los precios de los combustibles aumentan, 16.000 hogares que hoy están al límite, pasarían a estar en la pobreza energética. Por esto se hace necesario algo que suavice el impacto que puede tener el impuesto al carbono.

Las medidas de mitigación frente al cambio climático tendrán costos, pero eso no quita la necesidad de realizaras. Se plantean soluciones que van desde los subsidios directos a los hogares hasta formas de hacer accesible la generación de energías limpias a la población, pero como dice Urquiza:

“A punta de subsidio es pan para hoy y hambre para mañana. Todo eso requiere una política pública con una mirada a largo plazo e integral del problema”.

Además, Rebolledo declaró que la Agenda de Energía se puso como meta reducir los precios de las licitaciones de suministro eléctrico a clientes regulados en 25%, y que se han reducido las barreras de entrada para las energías renovables no convencionales y nuevos competidores, con lo que los precios de licitación han caído 63,1% respecto a 2013. A 2021 se espera que las tarifas bajen hasta en 20%, según informó el diario La Tercera.

Aquí el análisis que hicieron al respecto, de este tema poco visible, Cony Stipicic, Nicolás Vergara y Matías del Río.

SUSCRÍBETE A NUESTRO NEWSLETTER

ENTREVISTAS, NOTICIAS Y PODCAST