El gobierno boliviano envió a un grupo de élite de sus Fuerzas Armadas a la frontera con nuestro país para anular el contrabando en la zona, luego de que Carabineros detuviese a 9 funcionarios del país vecino acusados de asaltar a un camión chileno en el salar de Coipasa.
El ministro de Defensa, Reymi Ferreira, explicó que ya está en la zona “la unidad F10, que se dedica a controlar este tipo de situaciones con alto grado de especialidad, compuesta por oficiales y suboficiales”, según publicó el diario boliviano La Razón.
“Ya está bien de que gente amedrente, rodee, golpee y agreda a quien está cumpliendo con su deber, que es combatir el delito”, pronunció la autoridad haciendo referencia a los hechos acontecidos el 19 de marzo, cuando Carabineros detuvo a 9 funcionarios bolivianos en la región de Tarapacá.
Tras esto, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, afirmó esta mañana que la decisión del Gobierno boliviano de desplegar un grupo de élite de sus Fuerzas Armadas en la frontera con Chile, “es una acción delicada“.
“La frontera es estable y está normada por el tratado de 1904 y existen mecanismos de cooperación entre los dos países para combatir el crimen organizado”, afirmó además Muñoz este miércoles.
En ese sentido, el canciller llamó al Ejecutivo boliviano mantener la “prudencia” respecto de sus acciones en la zona limítrofe con Chile. “Hay que recomendar prudencia al Gobierno bolviano en estos momentos. Chile tiene que estar vigilante y defender nuestros intereses y nuestro territorio”, dijo. “Pero lo importante es mantener una actitud prudente y no escalar a algo que pudiera ser peligroso”, sentenció.
Foto: T13