Al interior de una casa de la ciudad de Ascain fue detenido el hombre sindicado como principal líder de ETA.
Con el arresto de Mikel Irastorza, a la cabeza del grupo desde el año 2015, la organización terrorista queda sin un líder a cargo y con apenas cinco miembros liberados. Según fuentes a cargo del desbaratamiento de la organización, tras los sucesivos golpes dados por las fuerzas de seguridad, la ETA ha quedado sin capacidad operativa.
Desde el gobierno español calificaron el arresto como “un duro golpe” para la organización terrorista.
En el operativo también fueron detenidos una pareja formada por un español de 59 años y una francesa de 56 años que lo acogían.