El cardenal Ricardo Ezzati defendió la negativa del Vaticano ante la solicitud de revelar antecedentes del obispo de Osorno, Juan Barros, requeridos en la investigación de encubrimiento contra el Arzobispado de Santiago por el caso Karadima.
Dichos antecedentes permitieron exculpar al religioso como encubridor de los abusos cometidos por el sacerdote de la parroquia El Bosque.
“La Santa Sede contestó el segundo exhorto y en ese segundo exhorto presentaba algunas objeciones, entre ellas, la fundamentación del exhorto y de acuerdo a la legislación internacional y de la legislación del Vaticano la Santa Sede comunicó en un comunicado verbal el día primero de abril de este año que eso no tenía curso”, dijo Ezzati.
“Pero la Santa Sede yo quiero decir que ha colaborado y ha respondido a lo que se le ha pedido puntualmente en un tiempo bastante rápido”, agregó.
La solicitud había sido realizada por las víctimas del sacerdote al ministro a cargo,Juan Manuel Muñoz, para que incluyera en su expediente la investigación que hizo la Santa Sede al obispo de Osorno.
Foto: Agencia Uno