El sacerdote Gerardo Joannon, regresó hace un mes de Argentina y sin previo aviso solicitó un “permiso de ausencia” para dejar de pertenecer a la Congregación Sagrados Corazones de Chile.
El clérigo se encontraba en la comunidad de los SS.CC. en la localidad de Merlo, Buenos Aires, donde cumplía una sanción impuesta por su participación en adopciones irregulares de niños durante los años 70´s y 80´s.
“Esta decisión busca que nuestro hermano comience un proceso de conversión y logre una distancia que le permita una toma de conciencia más lúcida de lo vivido”, explicó el encargado de la organización en Chile, Alex Vigueras.
Según el representante de los SS.CC., el retorno de Joannon a Chile no estaba previsto, lo que podría abrir otra arista de la historia: “Él no quiere dejar el sacerdocio, sino la congregación; por eso pidió el permiso (de ausencia), durante el cual no puede ejercer su ministerio sacerdotal”, aclaró ayer Vigueras.
La autorización entregada al sacerdote le permite vivir fuera de la congregación durante un año. Según Vigueras durante ese periodo Joannon no podrá ejercer su labor de sacerdote hasta que un obispo lo reciba, lo vincule a una diócesis y le conceda la licencia.
“Todo sacerdote debe estar incardinado (vinculado), es decir sujeto a un superior. Y él (Joannon), está en proceso de dejar nuestra congregación”, dijo el encargado.
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