Jorge Burgos pidió que no se exageraran los hechos, refutando a las versiones que señalaban una molestia de Mahmud Aleuy por la decisión que tomó Burgos al ceder a las presiones de los transportistas y autorizarlos a ingresar a Santiago centro. Estas sospechas se exacerbaron cuando esta jornada llegara pasado el mediodía al palacio de Gobierno y no cerca de las 7 de la mañana, como lo hace habitualmente.
El secretario de Estado respaldó al subsecretario, calificándolo como “un ejemplo de funcionario público”, por lo que no cree que vaya a renunciar, como había trascendido.
“Yo trabajo cotidianamente con el subsecretario Aleuy, lo hago además sobre la base de sentirme muy respaldado por una persona que hace su trabajo muy bien, con mucha competencia y espero seguir haciéndolo así”, dijo esta tarde en La Moneda.
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