El Ministerio de Vivienda está planificando una reforma al sistema de subsidios de arriendo, el cual podría contemplar la construcción de viviendas estatales para luego arrendarlas.
Según consignó El Mercurio, un 54% de los 5.058 subsidios que se lanzaron a inicios de 2014 no han logrado ejecutarse.
La situación es similar para el segundo llamado del beneficio: de los 2.036 subsidios lanzados, 1.317 (65%) aún no se convierten en un arriendo.
Según el informe del Minvu publicado en el matutino, el beneficio muestra tasas de aplicación relativamente bajas, similares a los programas destinados a la propiedad.
Entre los cambios que se evalúan se encuentra elevar la edad máxima de los postulantes de 30 a 35 años, aumentar el tope del subsidio desde 3 a 6 UF (75 mil a 150 mil pesos), y subir el valor máximo de la vivienda a 190 mil pesos.
Asimismo, el Gobierno estudia modelos adicionales de arriendo, como por ejemplo el modelo sueco, con la construcción de grandes conjuntos de viviendas estatales, bien localizadas dentro de una ciudad para destinar unidades habitacionales a arriendo.
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