El carguero ruso Progress M-27M, que se desvió de su órbita tras ser lanzado hace una semana con destino a la Estación Espacial Internacional (EEI), se desintegró esta madrugada.
“Según los datos del sistema nacional de control del espacio, la nave entró en las capas densas de la atmósfera y ardió”, informó la agencia espacial rusa, Roscosmos.
El carguero “dejó de existir a las 05.04 hora de Moscú (02.04 gmt) tras entrar en las capas densas de la atmósfera en la parte central del océano Pacífico”, señaló la agencia en un comunicado.
A lo largo del meridiano 160, y en pleno Pacífico Central, se encuentran las islas Salomón, fronterizas con Papúa Nueva Guinea al oeste, el mar de Coral al sur y Vanuatu al sureste. El meridiano 160 atraviesa también el territorio de los Estados Federados de Micronesia, un grupo de 607 islas diminutas que apenas tienen 702 kilómetros cuadrados.
La nave había sido lanzada el 28 de abril desde el cosmódromo de Baikonur (Kazajistán) rumbo a la EEI, pero el Centro de Control de Vuelos Espaciales de Rusia perdió el control después de que el carguero quedara situado en una órbita errónea y dejara de enviar datos a la Tierra.
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