Durante el año 2014, el producto interno bruto (PIB) creció 1,9% respecto del
año anterior Desde la perspectiva del origen, destacaron los servicios personales como los de mayor contribución, seguidos por los servicios empresariales. Todos los sectores económicos registraron variaciones positivas, salvo industria manufacturera, que cayó en forma marginal. Desde el enfoque del gasto, el PIB fue impulsado por la demanda externa, en tanto se contrajo la demanda interna. Esta última anotó una variación de -0,6%, como consecuencia de una caída en la inversión que no logró ser compensada por el aumento del consumo total. La inversión cayó arrastrada tanto por la formación bruta de capital fijo (FBCF) como por la variación de existencias. El desempeño de ambos componentes refleja la menor inversión en maquinaria y equipos y la desacumulación de inventarios de la industria manufacturera, respectivamente.
El incremento del consumo total fue impulsado, principalmente, por el gasto de los hogares en servicios y bienes no durables, y, en menor medida, por el consumo de gobierno. En relación con el comercio exterior, las exportaciones de bienes y servicios registraron una variación de 0,7% y las importaciones, una de -7,0%. En el caso de las exportaciones, aumentó el componente de bienes y disminuyó el de servicios, en tanto, en el caso de importaciones, cayeron ambos componentes.