A las palabras del rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, ya se sumaron el Hospital Parroquial de San Bernardo y la Clínica de la Universidad de los Andes, al negarse a practicar abortos en el caso de que el proyecto que despenaliza esta práctica, el cual ya fue presentado por la Presidenta Michelle Bachelet, finalmente se apruebe.
A la negativa, hoy se sumó la Red Salud, propiedad de ILC (brazo de inversiones de la Cámara Chilena de la Construcción), que abarca las Clínicas Tabancura, Bicentenario, Avansalud, Arauco Salud, Clínica Iquique y Hospital Clínico de Viña del Mar, además de 11 establecimientos de la red regional, negándose a realizar abortos en caso de que la ley se apruebe.
El gerente general de la institución, Ricardo Silva, recalcó que “nosotros no vamos a prestarnos para que se practique el aborto en nuestras clínicas”, según consignó el Diario Financiero. Además, aseguró compartir la visión del rector Sánchez respecto a la libertad de conciencia.
“Obviamente, el aborto pasa a ser legítimo si se deja de considerar un delito, pero dentro del marco legal tiene que haber espacio para que la gente tome decisiones. Si no, estamos hablando de una sociedad fundamentalista”, aseguró.
FOTO: El Dínamo