Consecuencias que ha dejado hasta el momento el Rally Dakar
Dos participantes fueron detenidos tras ser acusados de “daño patrimonial” y un piloto español acusa a la organización de poner en riesgo la vida de los competidores.
Nuevo competidor se suma a las bajas entre competidores nacionales
El piloto de Honda abandonó la competencia en la undécima etapa que comprendía un trayecto de 357 kilómetros entre las localidades argentinas de Cachi y Termas Río Hondo, debido a que tuvo que donar partes de su moto a su compañero de escudería Joan Barreda, mejor ubicado en la tabla general.
Israel se ubicaba en la posición 32°.
Ayer también desertó de la competencia, por falla mecánica, Ignacio Casale, quien estaba segundo en la tabla general de cuatrimotos.
Competidores extranjeros acusados de pasar por senderos arqueológicos
Una lamentable situación se vivió terminando la quinta jornada del Rally Dakar, luego que dos pilotos fueran detenidos por daño patrimonial al no respetar el trazado.
El hecho ocurrió en la etapa que une Copiapó y Antofagasta, donde los pilotos Matteo Cassucio (italiano, 37 años, categoría motos) y Keer Koolen (holandés, 49 años, quads) fueron acusados de pasar sobre unos senderos arqueológicos, según informó Canal 13.
La situación fue detectada por medio de un operativo diseñado entre la Intendencia de la Región de Antofagasta y la PDI, quienes incluso instalaron efectivos en la zona misma, para asegurarse que se cumplieran las medidas preventivas.
Ambos pilotos quedaron en proceso de investigación, lo que les permite seguir participando en la prueba, aunque pueden ser llamados en caso de ser necesarios en alguna diligencia.
Tras ser liberado, Cassucio ‘ninguneó’ el patrimonio nacional, comparándolo con el Coliseo Romano y aseguró que todo fue una exageración y no descartó que haya estado organizado.
Sus declaraciones provocaron disgusto en la organización de la competencia. “Nosotros como organización estamos en desacuerdo y condenamos sus palabras. Los patrimonios son propios de cada país y hay que respetarlos. Lo que dijo estuvo fuera de lugar y no nos parece bien las declaraciones del piloto”, aseguró Gregory Murac, encargado de las relaciones externas del Dakar.
Organización pone en riesgo vida de competidores
Por su parte, el español Ignacio Corcuera, señaló que los responsables de la competencia ponen en riesgo la vida de los competidores debido a la exigencia de las rutas.
“Fue una sangría: la pista (en la etapa 2) parecía un desguace o una escena de Mad Max. La parte inicial era complicada pero los últimos 150 kilómetros eran un completo sinsentido”, denunció el competidor de 52 años ante el diario El Mundo de España.
Según Corcuera la empresa francesa ASO, dueña de la carrera, diseñó un inicio de recorrido muy exigente para su propio beneficio. “Se conviritó en un show televisivo de las grandes multinacionales”, agregó.
El español manifestó que hubo pilotos que afrontaron la tercera etapa sin dormir, con temperaturas de más de 40 grados y con arena en los pulmones. “Podía ocurrir una tragedia y ocurrió“, sostuvo en referencia a la muerte del polaco Michal Hernik, quien falleció por deshidratación.
“Adoro el Dakar como prueba romántica, por sus inicios, pero esto es otra cosa, un negocio”. Corcuera compitió a bordo de una Mitsubishi Montero, y completó las dos primeras etapas en los puestos 125 y 127, respectivamente.
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