Elecciones legislativas en EEUU: El descontento con Barack Obama y la participación que favorece a los republicanos
[Las claves para entender qué eligen este martes los estadounidenses] Todo apunta a que los republicanos terminarán controlando las dos cámaras del Congreso. Por lo que la principal duda es cómo serán estos dos últimos años de Gobierno antes de las elecciones presidenciales de 2016.
Este martes en Estados Unidos se vota para renovar a parte importante del Congreso, en medio de un ambiente de descontento con el gobierno de Barack Obama, debido a la estancada situación económica y a la inseguridad a nivel mundial que han provocado el auge del ISIS y la virus ébola. Muestra de estas sensación generalizada fue rescatada por la última encuesta del Pew Research Center.
Tanto es así que el Partido Republicano espera controlar las dos cámaras en la última elección antes de las presidenciales de 2016. Por lo mismo, el Partido Demócrata ha centrado su campaña en limitar las pérdidas.
Este 4 de noviembre, los estadounidenses eligen casi todo lo elegible, menos el presidente y el vicepresidente: los 435 miembros de la Cámara de Representantes; 33 de los 100 senadores; 38 de los 50 gobernadores de los estados; y 46 de los 50 Congresos estatales; miles de cargos locales; y los jueces de los Tribunales Supremos de 30 estados.
El Partido Republicano, con 233 escaños, es mayoritario desde 2011 en la Cámara de Representantes y espera ampliar la mayoría en estas elecciones. El Partido Demócrata, con 53 senadores, domina el Senado pero, según varios sondeos, los republicanos ganarían los seis escaños necesarios para la mayoría. Si esto ocurre, la derecha controlará las dos Cámaras del Congreso.
Un resultado probable ya que en al menos cinco carreras la diferencia entre los candidatos es de solo un punto porcentual en las encuestas. Así que bastan unos pocos miles de votos para determina el control de esa cámara.
Otro factor que favorece el triunfo republicano, es que en las legislativas históricamente ha participado solo el 40% del electorado. Las minorías y los jóvenes, votantes demócratas, votan más en las presidenciales que en las legislativas.
La esperanza de los demócratas está en el sur, zona que los afroamericanos han vuelto a poblar en los últimos años. Como Georgia, un antiguo cónclave republicano que, si su población asiste en masa a votar, puede demostrar que hoy tiene mayoría demócrata. Algo similar ha ocurrido en los últimos años en Virginia, Carolina del Norte y Florida con la fuerza de los votantes cubanos.
Si los pronósticos de las encuestas se cumplen, la duda que queda es cómo se administrará el poder con una Casa Blanca demócrata y un Congreso republicano.
Una posibilidad es que los republicanos anulen la capacidad de maniobra de Obama, otra es que el Congreso apruebe más leyes para limpiar su imagen con miras a las elecciones presidenciales de 2016. Entre ellas, la reforma migratoria.
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